Microsoft plantea deshacerse de las marcas Nokia y Windows Phone para comercializar sus smartphones, además de eliminar el concepto Surface a las tabletas que comercializa Microsoft unificándolo con Lumia, que será la marca como referencia a usarse en los teléfonos inteligentes de la firma.
Documentos secretos revelados por varios medios de prensa evidencian que la firma desmiente así todo lo que aseguró públicamente cuando compró la finlandesa Nokia, de la cual ya despidió a más de 18 000 empleados.