Primer plano de una huella dactilar. Autor: El Mundo Publicado: 21/09/2017 | 05:10 pm
La ciencia es uno de los mejores aliados de la policía en la lucha contra el crimen. Un grupo de investigadores australianos han desarrollado una nueva forma de recuperar huellas dactilares a partir de pruebas antiguas en las que no se pudieron obtener huellas útiles con los métodos tradicionales, afirma El Mundo.es.
Los autores, de la Universidad de Tecnología de Sydney, opinan que esta investigación pionera a escala mundial podría ayudar a la policía a reabrir casos sin resolver.
Los científicos usaron técnicas de nanotecnología para detectar huellas digitales antiguas, secas y débiles, que no pueden ser reveladas por las técnicas usadas hasta ahora.
Estas técnicas revelan detalles de forma mucho más aguda de las trazas de aminoácidos que puedan quedar en las huellas dactilares de mucha edad. Algo de lo que nos son capaces las técnicas actuales. El objetivo de la investigación es detectar las huellas dactilares de cualquier edad y en cualquier superficie, según afirma la BBC.
Científicos y policías trabajando juntos
El proyecto es fruto de la colaboración entre académicos de Sydney y Canberra y la Policía Federal Australiana. Y ha contado con la ayuda de la Universidad Northern Illinois de Estados Unidos.
Las muestras usadas en la investigación son algunas que no podían ser identificadas y que sí han podido ser desveladas con estos nuevos tratamientos químicos que se dirigen a los aminoácidos.
Estas moléculas se encuentran comúnmente en el sudor y por lo tanto están presentes en la mayoría de las huellas dactilares. El uso de los aminoácidos como diana para obtener huellas útiles se ha dado durante décadas. Sin embargo, los investigadores de Sydney están empleando la nanotecnología para obtener detalles más nítidos de muestras degradadas.
Aumento de la tasa de casos resueltos
«Tenemos un método que funciona muy bien y que es capaz de mejorar las impresiones en las pruebas de elevada edad. Y es posible utilizarlo en casos abiertos antiguos y para pruebas viejas que han estado dando vueltas por ahí durante un buen tiempo», asegura a la BBC el Dr. Xanthe Spindler, autor de la investigación.
«Así que creo que esto es algo que realmente va a situar los límites de la ciencia policial en una nueva dimensión y espero que ayude a mejorar las tasas de éxito de la resolución de casos», dice.
La investigación continúa y el Dr. Spindler afirma que se trata de un nuevo paso adelante para tratar de conquistar uno de los grandes objetivos de la ciencia forense: obtener huellas digitales de la piel humana de las víctimas.