Ludi Teatro de Cuba y Theatre Asylum, de Canadá presentan Nos vemos, de Guillaume Corbeil. Autor: Ludi Teatro Cuba Publicado: 21/09/2017 | 06:49 pm
Cuando en 2014, luego de muchos años de trabajo en el Buendía, de Flora Lauten, el actor Miguel Abreu decidió fundar Ludi Teatro, quizá no imaginó que después de apenas dos vueltas completas al almanaque, su joven colectivo lograría pasar del anonimato a inscribirse, con sede propia, como una de las activas agrupaciones del circuito de presentaciones de Línea.
Lo vuelven a demostrar con el inicio de una intensa temporada que incluye dos novedades. La primera, que se estrenará el día 10, en la sala Tito Junco del Centro Cultural Bertolt Brecht lleva por nombre El espejo; y la segunda, titulada Nos vemos, es una colaboración con una agrupación canadiense —muy a tono con la venidera Feria Internacional del Libro, cuyo país invitado es Canadá— que podrá disfrutarse a partir del 24 de febrero en la sede de Ludi, sita en calle I entre 9 y 11, en el Vedado capitalino.
El espejo, dirigido por Marian Montero, una de las actrices de la agrupación, devenida directora, es una versión de El peine y el espejo, de Abelardo Estorino. «Es una manera distinta de revisitar el texto, a partir de múltiples elementos que se integran como el universo radiofónico, la música y la danza. Esta reedición dramatúrgica tiene el objetivo de rejuvenecer el texto», explicó a JR Miguel Abreu.
En tanto, la Directora de la puesta, precisó que se trata de una versión ajustada a los códigos de la novela radial. Marian Montero, quien tuvo mucho éxito el pasado año por la dirección del espectáculo Night Club, incursiona ahora en una idea atractiva y arriesgada.
«Queremos homenajear el espacio de la novela cubana en el éter. Para esto convocamos al guionista de radio Ariel Amador, quien nos hizo todo el guion, que incluye narrador, efectos de sonido y todo lo que se supone habría en una producción radial», subrayó Marian.
«Podría decirse que es un coctel, porque a todo eso debemos sumar un hecho muy especial y es que los actores son los que hacen la música de esta radionovela teatral con sus voces, y ejecutan coreografías de danza teatro. Nuestra intención es que el público sienta que ese texto está siendo radiado, al tiempo que convoca a reflexionar sobre los conflictos propios de este medio y los que aborda Estorino como la religión y el machismo. Es una historia sencilla, con pocos personajes, pero que nos tiene muy entusiasmados», agregó.
Como una suerte de propuesta intercultural podría catalogarse la segunda novedad de Ludi Teatro. Nos vemos es una colaboración con la compañía Theatre Asylum, de Canadá. El texto, de 2013, aborda el tema de las redes sociales, los mass media y la forma en que el hombre se está relacionando o enfrentando a esas realidades, y cuestiona hasta qué punto es cierto o falso las cosas que se publican.
Escrita por el dramaturgo y escritor Guillaume Corbeil constituye una fuerte crítica social al ser humano a partir de su cada vez más marcada dependencia de esas estructuras sociotecnológicas. El director Miguel Abreu comenta que ha sido un texto muy representado en diversas plazas foráneas, y «para su estreno en español invitamos a la directora canadiense Jennifer Capraru, conocida en nuestro país, ya que en 2015, durante la semana de francofonía, dirigió una obra llamada Las Cuñadas. Desde entonces nos quedó pendiente ese anhelo de trabajar juntos y por suerte ahora apareció este texto y con él la posibilidad de materializar el sueño».
Nos vemos se mantendrá en cartelera los viernes, sábados y domingos, en horarios habituales, lo que queda de febrero y todo marzo.
Al interrogar a Miguel Abreu sobre la evolución del colectivo, que ahora sorprende iniciando el año con dos estrenos, refirió que el crecimiento ha sido notable.
«Nosotros tenemos la suerte de poseer una base de trabajo de muchos años. Aunque el colectivo nace en 2014, como director, ya tenía varios espectáculos estrenados y otros tantos en la actuación, fruto de mi labor en Teatro Buendía, El Público, Argos Teatro…
Abreu asegura que sus empeños son para que Ludi Teatro sea una compañía abierta, multicultural y diversa, donde no solo dirige él, sino que, cual escuela o laboratorio, lo hagan también los más jóvenes, de la misma manera que él pudo hacerlo en Buendía.
«Me gusta que las personas entren y salgan, pues no pretendo que este sea un espacio donde permanezca la gente de manera obligatoria. Quiero un ambiente donde fluya la energía, que vengan talentos, que haya deseos de hacer, que no sea algo enclaustrado, no un teatro cárcel, místico, extraño u oscuro. Somos un espacio lúdico, de juego con la escena, pero a la vez muy serio, con un elevado sentido de la ritualidad del trabajo, que es lo que nos caracteriza y nos ha llevado a conseguir todo lo logrado hasta hoy».