En horas de la mañana del lunes un reducido número de elementos mercenarios, intentaron realizar una provocación burda y descarada en los alrededores de la Plaza de la Revolución.
Entre sus intenciones estaba reclamar la excarcelación de contrarrevolucionarios sancionados por actividades contra nuestro pueblo y sus posiciones mercenarias y anexionistas, para lo cual convocaron, como siempre, a los medios de la prensa extranjera acreditados en nuestro país, con el fin de que estos difundieran sus acciones provocativas.
De inmediato y espontáneamente el incidente fue rechazado por la población, que a esa hora se dirigía a sus centros de trabajo y estudio. Fuerzas femeninas del Ministerio del Interior evacuaron a las provocadoras a sus hogares con el fin de evitar un enfrentamiento con nuestra población.
Estos contrarrevolucionarios días antes habían obtenido el apoyo de los representantes de la mafia anticubana, al recibir una llamada telefónica de la congresista
Ileana Ros-Lehtinen, quien con evidente propósito injerencista estimuló el accionar de estos grupúsculos, como justificación para recibir el financiamiento que otorga el gobierno yanqui. La emisora subversiva anticubana se hizo eco del mencionado contacto, al igual que los realizados en días pasados por esta representante del gobierno norteamericano con el connotado terrorista Luis Posada Carriles.
Ni provocaciones, ni patrañas mercenarias, empleando métodos ordenados por sus amos yanquis mellarán la firmeza y voluntad de las actuales y futuras generaciones cubanas, las que trabajan por construir una sociedad mejor, basada en la tradición independentista y antiimperialista, con un proyecto socialista, convencidos de que la historia de usurparnos la independencia alcanzada con tanta sangre no se repetirá jamás.