Abbás y Putin se reunieron en Moscú. Autor: Sputnik Publicado: 13/08/2024 | 04:52 pm
MOSCÚ, agosto 13.— El presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo palestino, Mahmud Abbás, sostuvieron este martes conversaciones en la región de Moscú.
«Contamos con el apoyo humanitario a los palestinos y con el fin de la política de expatriación», dijo Abbás, recalcando que su pueblo no aceptará «la expatriación de palestinos de la Franja de Gaza, de Cisjordania y de Jerusalén, como ha ocurrido repetidamente en el siglo XX». «Creemos que con su apoyo lograremos nuestros objetivos», dijo al mandatario ruso, citado por Russia Today.
Moscú sigue con atención la situación en Oriente Medio, pese a que la operación militar especial continúa su curso, afirmó Putin. «Todo el mundo sabe que hoy Rusia, lamentablemente, debe defender sus intereses, defender a su pueblo con las armas en la mano, pero lo que está sucediendo en Oriente Medio, lo que está sucediendo en Palestina, ciertamente no pasa desapercibido», afirmó.
«Las raíces de este problema se remontan al pasado y están
asociadas, en primer lugar, con el hecho de ignorar las decisiones previamente tomadas a nivel de organizaciones internacionales, principalmente de la ONU, sobre la creación de un Estado palestino independiente», continuó Putin. «Para garantizar una paz estable, confiable y duradera en la región, es necesario implementar todas las decisiones de las
Naciones Unidas y, en primer lugar, crear un Estado palestino de pleno derecho», agregó.
Rusia siempre ha abogado por una solución pacífica del conflicto palestino-israelí, subrayó el líder ruso.
Esta postura de la diplomacia rusa se corresponde con los clamores de la comunidad internacional que han abogado por el cese de las prácticas genocidas del Estado israelí y la política de tierra arrasada que ha defendido a toda costa el primer ministro Benjamin Netanyahu.
Por su parte, Abbás recordó que desde 1947 han sido adoptadas más de mil resoluciones de la ONU sobre esta cuestión. Sin embargo, dijo que la organización, «debido al comportamiento estadounidense y a la presión de Estados Unidos, fracasó en su misión de adoptar una resolución que implementara y garantizara la realización de los derechos del pueblo palestino».