Ingeniero biomédico Lester Liván Linares González Autor: Jorge Pérez Cruz Publicado: 29/05/2020 | 10:04 am
A pesar de su juventud, el ingeniero biomédico Lester Liván Linares González sabe porque está en Venezuela y con admirable locuacidad devela su vocación humanista cultivada por la Revolución y la familia.
Mi propósito es cumplir mi deber profesional y las obligaciones como miembro de la Misión Médica Cubana, para contribuir al sostén de las tecnologías instaladas en las instituciones sanitarias del país incluidas en el proyecto de colaboración, relata.
Natural del municipio pinareño de La Coloma, Lester se graduó en la Universidad Tecnológica de La Habana José Antonio Echeverría en el calendario docente 2008-2014 e inauguró su vida laboral en el Centro Electromedicina de ese occidental territorio cubano, donde puso en práctica los saberes adquiridos para enfrentar los desafíos de una profesión imprescindible en la sostenibilidad de los servicios médicos.
Los retos de la pandemia
Con esas pericias desarrolladas en Cuba llegó a la Patria de Bolívar hace ya 35 meses, estuve dos años en el Estado de Cojedes en funciones de electromédico del Centro de Alta Tecnología María Teresa Rodríguez del Toro, recuerda y desde abril de este año funge como especialista del Grupo Nacional de Electromedicina.
La pandemia ha aumentado la intensidad del trabajo, pero siempre hemos actuado, afirma, con espíritu innovador, buscando alternativas y soluciones en escenarios muy complejos.
Venezuela, como Cuba, enfatiza, sufre el impacto del bloqueo impuesto por Estados Unidos que dificulta la adquisición de piezas de repuesto y accesorios para el equipamiento, entonces acudimos a nuestras experiencias en la Patria para echar a andar de cualquier forma lo que no funciona.
Con ese espíritu ha enfrentado la contingencia sanitaria actual, desde que comenzó la COVID-19 hemos laborado en la gestión médica de la tecnología instalada, el mantenimiento y reparación de medios de soportes de vida como ventiladores pulmonares, de los cuales entre marzo y abril más de 30 han recibido beneficios; monitores de parámetros fisiológicos y bombas de infusión y en el asesoramiento del personal médico en el uso y funcionamiento de esos medios, relata Léster.
Ahora, junto a sus colegas, labora intensamente en la instalación y adecuación del equipamiento de lo que será el nuevo laboratorio que el Gobierno Bolivariano acomete en áreas del Centro Nacional de Genética Médica, Estado de Miranda, para la detección del Sars-Cov-2 y seguir dando la batalla por la vida.
Un joven con veteranía
A pesar de su juventud, el currículo de Léster tiene veteranía a juzgar por la amplia página de servicios prestados, porque somos los garantes del buen funcionamiento de la tecnología médica, desde un esfigmógrafo hasta los equipos de resonancia y de los sistemas de apoyo a la infraestructura de salud, dice convencido de la trascendencia de esta especialidad.
Y habla como un consagrado de su participación en el montaje de un tomógrafo de 128 cortes, uno de los más modernos del país, asegura, y de varias ingeniosas intervenciones para poner en funcionamiento otros medios diagnósticos que fortalecen el Sistema Público Nacional de Salud en Venezuela, con el objetivo de prestar servicios médicos gratuitos y de calidad a toda la población defendido por la Revolución Bolivariana en estrecha articulación con los colaboradores cubanos.