MONTREUX, enero 22.— El secretario norteamericano de Estado, John Kerry, insistió este miércoles en desvirtuar el objetivo de la conferencia internacional de paz, conocida como Ginebra II, al intentar excluir al legítimo presidente sirio, Bashar al-Assad, en la búsqueda de una solución al conflicto en ese país.
El jefe de la diplomacia estadounidense pretendió reducir el propósito de la conferencia a la formación de un ejecutivo temporal en el que estén ausentes las actuales autoridades de Damasco, lo que no acepta el Gobierno sirio.
El ministro de Relaciones Exteriores de la nación árabe, Walid Muallem, respondió a Kerry al asegurar que solo el pueblo de este país tiene derecho a decidir el futuro de su Presidente.
«Señor Kerry, nadie en el mundo tiene derecho a otorgar o retirar la legitimidad de un Presidente, una Constitución o una ley, excepto los propios sirios», dijo Muallem en respuesta a las declaraciones de Kerry.
Muallem fue interrumpido durante su intervención por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien objetó que el jefe de la diplomacia siria había superado el tiempo de palabra asignado. Muallem replicó diciendo que tenía que expresar la posición de su país y continuó con su discurso, narró AFP.
Las negociaciones oficiales entre el Gobierno sirio y la oposición arrancarán el viernes. La jornada de este miércoles solo fue para que los ministros que asisten a la reunión expresaran criterios y expusieran sobre el tema.
No obstante, se registraron enfrentamientos entre el Gobierno sirio y la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Revolución y la Oposición Siria (Cnfros), cuyos representantes se sentaron a conversar este miércoles por primera vez en tres años.
El ministro de Relaciones Exteriores de Siria, Walid Muallem, exhortó a la comunidad internacional a «dejar de apoyar a la oposición armada» en el país y observó que algunos países que asisten a la conferencia tienen «sangre siria en sus manos», citó Xinhua.
En tanto, Kerry amenazó nuevamente con una salida militar a la crisis de la nación árabe. En conferencia de prensa, ante preguntas de periodistas sobre la opción bélica, el Secretario de Estado apuntó que «el presidente (Barack) Obama no retiró ninguna opción de la mesa».
Según ANSA, Kerry afirmó que el uso de la acción militar «se relacionó con el uso de armas químicas», una cuestión que, dijo, por ahora está resuelta, «pero vamos a ver qué pasa en el futuro».
La respuesta de Kerry está en sintonía con afirmaciones de analistas que estiman que Estados Unidos, en desventaja en las actuales negociaciones, podría continuar con el apoyo a bandas armadas en el terreno, con el objetivo de cambiar el escenario militar a favor de sus intereses, que le permita poder imponer su agenda al Gobierno sirio, a Rusia e Irán.
Esta última nación no participa en la reunión, pues el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, presionado por Washington y la oposición siria, le retiró la invitación apenas 48 horas antes de este encuentro.