BAKU, Azerbayán, abril 4.— La oposición siria no derrotará al Gobierno del presidente sirio, Bashar Al-Assad, aunque se arme hasta los dientes, aseguró este miércoles el canciller ruso, Serguei Lavrov, durante un discurso en esta capital.
Por eso los activistas antigubernamentales apuestan por la participación de fuerzas exteriores, añadió el Ministro ruso del Exterior, citado por Russia Today, y quien también advirtió que el suministro de armas a los opositores por parte de países árabes y occidentales transformará el conflicto en «una masacre».
Por su parte, el Gobierno sirio ya ha comenzado a retirar a su ejército de las ciudades y localidades, según establece el plan de paz propuesto por el ex secretario de la Naciones Unidas, Kofi Annan.
El plan del enviado especial de la ONU, apoyado tanto por Al-Assad como por representantes de la oposición, prevé un cese de las hostilidades por ambas partes del conflicto, pero no hace ninguna alusión a cambios en el régimen.
Sin embargo, Estados Unidos y el grupo denominado Amigos de Siria reconocieron al opositor Consejo Nacional Sirio (CNS) como su principal socio en las negociaciones, reforzando la presión sobre Damasco.
Según Lavrov, esta coalición internacional contra Damasco socava los esfuerzos para poner fin a la violencia, pues el grupo aboga por que la oposición rechace las conversaciones con el Gobierno y prepara la financiación, el envío de armas a los opositores, así como nuevas sanciones contra Damasco.
En ese sentido, el jefe de la diplomacia rusa acusó a Occidente de estar a favor de una solución militar en Siria que beneficia a los insurgentes.