Las demostraciones de respaldo al Presidente sirio constatan el apoyo del pueblo. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:15 pm
DAMASCO, noviembre 11.— El canciller sirio, Walid al-Moallen, rechazó una declaración del Departamento de Estado norteamericano que llama a países árabes a sumarse al boicot político y económico contra Siria.
En una carta dirigida al secretario general de la Liga Árabe, Nabil al-Arabi, el Ministro del Exterior sirio alerta que tal intromisión transgrede los estatutos de la Carta de la Liga Árabe y el espíritu del acuerdo alcanzado entre Damasco y esa organización regional, reportó PL.
Moallen advierte que esa provocación de Washington constituye una justificación para una más aguda interferencia extranjera, e imponer sanciones económicas y políticas adicionales a las ya establecidas con la anuencia de algunos estados árabes.
El lunes en Trípoli, capital de Libia, donde estuvo en una fugaz visita, la secretaria norteamericana de Estado, Hillary Clinton, dijo que su Gobierno coordina con Estados miembros de la Liga Árabe para imponer sanciones a Damasco.
El Canciller sirio expresa, a su vez, la esperanza de que ese organismo no responda al llamado de Washington, al tiempo que advierte sobre los peligros que entrañarían tales exhortaciones para el futuro de una acción árabe concertada bajo el auspicio de la Liga.
El ente regional tiene previsto reunirse el fin de semana en su sede de El Cairo, Egipto, para evaluar la situación en Siria.
Mientras, el patriarca Gregorio III Laham de Antioquía, uno de los líderes de la iglesia ortodoxa en Siria, denunció que la interferencia extranjera en su país es un hecho irrebatible.
Citado por la agencia de prensa Cham Press, Gregorio III Laham expresó que lo que vemos a diario muestra la verdad de lo que el presidente Bashar al-Assad advierte sobre la interferencia foránea.
Los acontecimientos en Siria prueban la injerencia de EE.UU. y otros países de Europa, dijo, y enfatizó que el éxito de Siria y del presidente Al-Assad al afrontar tales desafíos, es también un éxito para el mundo árabe e islámico.
En ese mismo sentido se manifestó el vicecanciller ruso, Mikhaill Bogdanov, quien reiteró la posición de Moscú de que la comunidad internacional debe ayudar a Damasco a llevar a cabo el diálogo nacional, como lo ha propuesto el Gobierno y lo acepta la inmensa mayoría de la población.