Rescatistas buscan sobrevivientes bajo los escombros de un complejo residencial bombardeado por la OTAN en Surman, 70 kilómetros al oeste de Trípoli. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:11 pm
TRÍPOLI, junio 25.— Los rebeldes libios continuaron hoy su ofensiva en regiones del occidente, apoyados por los bombardeos aéreos de la OTAN, mientras sus portavoces trasmitieron señales contradictorias sobre posibles negociaciones con el Gobierno de Muamar El Gaddafi, publicó PL.
Reportes de canales televisivos regionales indicaron que los opositores armados atacaron posiciones del Ejército gubernamental en torno a Zintan, Dafniya y otras áreas del oeste del país asediadas por la aviación de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Portavoces de la insurgencia aseguraron tener controlada casi toda la región de las montañas de Nafusa en el extremo occidental y preparar un asalto para apoderarse de Gharyan, el último poblado de las Montañas Occidentales aún bajo dominio de las fuerzas de El Gaddafi.
Esa región del suroeste es estratégica porque por ella pasa una ruta clave de abastecimiento para el Gobierno desde Argelia hacia el sur de Libia, y si cae en manos de los sublevados afectaría sobremanera a las tropas regulares, apuntó un vocero.
La oposición concedió particular destaque este sábado al apoyo de algunos integrantes de un conocido club de fútbol del país a los rebeldes y, por extensión, al Consejo Nacional de Transición (CNT).
Igualmente, fuentes contrarias a El Gaddafi reseñaron que las demostraciones públicas de numerosos jóvenes sobre sus habilidades militares, luego de finalizar cursos de adiestramiento impartidos en Misratah por exsoldados de las fuerzas armadas libias que desertaron.
Por otro lado, el portavoz del CNT, Mahmud Shammam, admitió que ese órgano representativo de los opositores ha sostenido contactos con miembros del Gobierno de El Gaddafi para hallar una solución política.
Según Shammam, en el hipotético caso de que derrocaran al mandatario libio, los alzados podrían estar preparados para permitirle a él y su familia permanecer en una localidad remota del país, siempre que no ocupe ningún cargo político.
Pensamos que él (El Gaddafi) debe aceptar que tiene que irse o, al menos, que se retira a una parte aislada de Libia. No podemos ver problemas en que él vaya a un oasis libio, bajo supervisión internacional, apuntó el vocero en declaraciones a medios europeos.
Sin embargo, el también portavoz del CNT Jalal El Gallal descartó en declaraciones al canal catarí Al Jazeera que el pueblo libio admita la permanencia del veterano líder en el país.
No nos oponemos a una solución política, pero El Gaddafi tiene que irse de Libia, apuntó El Gallal al transmitir otra arista del discurso de la insurgencia sobre gestiones pacificadoras ahora en marcha.