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«No hay necesidad de pedir asilo, sino hospitalidad. Yo sigo siendo el presidente de Honduras», señaló el mandatario hondureño Manuel Zelaya, en conferencia de prensa conjunta con el presidente costarricense, Oscar Arias, desde San José, Costa Rica.
«He sido victima de una extorsión, un secuestro a mano armada, una violencia brutal, sacado de mi casa apuntado por armas de grueso calibre, conducido a San José, sin saber a dónde iba. Un exceso sin límites de quien tiene armas frente a un civil (...) Es obra de militares ambiciosos, a los que tienen que haberles pagado algo por esto».
«El pueblo de Honduras no va a aceptar jamás un gobierno surgido de la usurpación y de la fuerza», añadió.
Respecto al apoyo internacional, manifestó que este lunes asistirá a Managua a una cumbre de presidentes del área centroamericana. Asimismo dijo haber recibido una llamada de Thomas Shannon, subsecretario del Departamento de Estado, quien le informó que el embajador de EE.UU en Honduras se está pronunciando contra el zarpazo, que EE.UU. «no apoya esta brutalidad», y que le esta dando todo su apoyo a la OEA.
En cuanto a la información de que dispone de los acontecimientos, refirió que están apagadas todas las radios y las emisoras de TV en Honduras. «Me dicen que el pueblo está rodeando las tanquetas junto a la Casa Presidencial. Llamo al pueblo a la calma, a una resistencia pacífica, no violenta».
