BOGOTÁ, julio 9.— Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) refutaron tácitamente que la liberación de Ingrid Betancourt, tres contratistas estadounidenses y once soldados en su poder haya sido un rescate, en un comunicado que titularon «Despejando las mentiras acerca de la fuga de los 15 prisioneros de guerra», y en el que ratificaron «la vigencia de nuestra política por concretar acuerdos humanitarios que logren el intercambio, y además protejan a la población civil de los efectos del conflicto».
El mensaje está fechado en «las montañas de Colombia» el día 5 de julio y circuló en los medios internacionales de prensa este viernes, mientras el presidente de ese país, Álvaro Uribe, recorría con su homólogo venezolano Hugo Chávez las instalaciones del Centro de Refinación de Paraguaná, en Venezuela, considerado el más grande del mundo, y tras lo cual ambos sostendrían conversaciones de trabajo, según se anunció.
El comunicado de cinco puntos emitido por el Secretariado del Estado Mayor Central de las FARC, largamente esperado después de las múltiples versiones y especulaciones que surgieron alrededor de la versión brindada por el ejército colombiano, adjudica «la fuga de los 15 prisioneros de guerra» a la «despreciable conducta» de ‘César’ y ‘Enrique’ (los dos guerrilleros que custodiaban a los rehenes, identificados por agencias informativas como Gerardo Antonio Aguilar Ramírez y Alexander Farfán Suárez, respectivamente) quienes, dice el texto, «traicionaron su compromiso revolucionario y la confianza que en ellos se depositó».
Ello confirmaría versiones según las cuales ‘César’ y ‘Enrique’ habrían sido comprados, lo cual tampoco contradice la aseveración de las autoridades colombianas de que se trató de un operativo de inteligencia que penetró a las FARC (aunque no evidencia que haya infiltrado al alto mando), y tampoco refuta las afirmaciones de que para ello contó con el apoyo de Estados Unidos y del Mossad israelí.
Al tiempo que ratifican su disposición al acuerdo humanitario, las FARC reiteran también que «la paz que requiere Colombia debe ser resultado de acuerdos que beneficien a las mayorías» y no lo que llama «la paz de los sepulcros sostenida sobre la corrupción, el terror del Estado, la felonía y la traición.»
El documento, publicado en el sitio web Resistencia Nacional de las FARC, sale a la luz cuando diversas informaciones han anunciado también la extradición de ‘César’ y ‘Enrique’ a Estados Unidos, y se multiplican los llamados para que sean liberados el resto de los rehenes en poder las FARC, llamado hecho incluso por Ingrid Betancourt, quien permanece en Francia y, según el presidente Chávez, requirió de nuevo su intermediación para llevar a término el reclamo.
Al dar a conocer su versión de los hechos, la guerrilla también alerta que «de persistir en el rescate como única vía, el gobierno (de Álvaro Uribe) debe asumir todas las consecuencias de su temeraria y aventurera decisión.
Al aseverar que «las causas por las que luchan las FARC-EP siguen vivas, el presente es de lucha y el futuro es nuestro», el Secretariado también ratifica que se mantendrá sobre las armas.
«El camino por lograr las transformaciones revolucionarias, en ninguna parte del mundo ni en ningún momento de la historia ha sido fácil, por el contrario, y por ello nuestro compromiso se acrecienta ante cada nuevo reto o dificultad», expresa.