El desprendimiento de un glaciar en la cordillera del Himalaya en el norte del país provocó este domingo un alud que ha dejado un saldo de al menos 150 personas desaparecidas y nueve muertes.
La avalancha, desatada por una bolsa de agua que estaba represada dentro del glaciar, barrió una presa del proyecto hidroeléctrico Rishiganga, donde trabajaban unas 50 personas, y varios pueblos de montaña aledaños al río Dhauli Ganga, ubicado a unos 500 kilómetros al norte de Nueva Delhi, la capital india.
«Todavía no hemos confirmado el número exacto» de desaparecidos, relató a la agencia Reuters Om Prakash, el secretario del estado de Uttarakhand, donde sucedió el desastre. Sin embargo, calculan que los desaparecidos ascienden a 150.
El primer ministro del país, Narendra Modi, aseguró estar pendiente de la situación y mandó un mensaje de ánimo en Twitter. «India apoya a Uttarakhand y la nación reza por la seguridad de todo el mundo allí».
Varios pueblos y represas situados más abajo en los transcursos de los ríos afectados ya se encuentran en alerta y algunos desalojaron la zona.
El Gobierno desplazó a unidades militares con helicópteros para hacer un reconocimiento aéreo de las afectaciones, mientras el resto de equipos de rescate se preparan para las labores de búsqueda.