En un país ocupado todo es posible. Al menos 90 personas, la mitad de ellos civiles, murieron este viernes en un bombardeo de la OTAN en la provincia afgana de Kunduz. Entre las víctimas hay numerosos niños y mujeres, los que fueron amortajados por sus vecinos Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 04:51 pm
KABUL, octubre 9. —La organización humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció este lunes que 33 personas continúan desaparecidas tras el bombardeo aéreo que ejecutó el sábado último la OTAN en la ciudad norteña afgana de Kunduz.
Como resultado de ese ataque de aviones estadounidenses contra un hospital administrado por MSF, murieron 22 personas y 35 recibieron heridas, refiere Prensa Latina.
El presidente norteamericano, Barack Obama, ofreció disculpas por ese lamentable hecho, aunque la organización humanitaria consideró insuficiente el mensaje del mandatario.
Las consecuencias de la metralla lanzada por la alianza noratlántica, liderada por el Pentágono, obligaron al cierre de la instalación de salud y a la retirada del personal de MSF.
La organización médica dio a conocer que nueve pacientes y 24 empleados continúan desaparecidos.