Un nuevo fuego en la mina de Soma dificulta el rescate de los cadáveres. Autor: Telesur Publicado: 21/09/2017 | 05:49 pm
ANKARA, mayo 17.— El ministro de energía turco, Taner Yildiz, informó este sábado que el número de fallecidos por el accidente ocurrido en una mina en Soma, aumentó a 301, según destacan reportes de Telesur.
De acuerdo con declaraciones de Yildiz, las labores de rescate se han visto entorpecidas ante un nuevo fuego que se inició hoy en otra sección del pozo, debido al incremento de los niveles de gases inflamables.
Explicó que como máximo son tres los cuerpos que restan por extraer de la instalación y que las llamas están a unos 250 metros de los cadáveres y es muy difícil llegar hasta ellos.
El balance se da a conocer un día después de que la policía turca dispersara con camiones de agua y gases lacrimógenos a unas 10 mil personas que manifestaban en Soma para denunciar las condiciones de trabajo de los mineros, destaca la agencia Prensa Latina.
Entre los mayores focos de manifestaciones están Esmirna, Estambul, Ankara y la propia Soma, donde ayer la policía reprimió violentamente a una multitud concentrada para condenar a las autoridades por la magnitud de la tragedia y denunciar las condiciones de trabajo en las minas.
La compañía Soma Holding, encargada de la excavación, negó toda responsabilidad sobre el incidente y aseguró que no se cometieron errores en la operación minera.
Por su parte, el primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, acusado de haber descuidado la seguridad de los mineros y de ser indiferente a su sufrimiento, atribuyó la responsabilidad del accidente a la «fatalidad» y rechazó las acusaciones de negligencia.
«Los accidentes forman parte de la propia naturaleza de las minas», comentó.
En cambio, los sindicatos atribuyen lo ocurrido a los recortes del presupuesto destinado a la seguridad y a las irregularidades en el cumplimiento de las normas de protección tras la privatización de las instalaciones.
Mientras, en su edición de este sábado, el diario local Milliyet señala que un informe preliminar sobre las causas de la catástrofe apunta a la falta de detectores de monóxido de carbono en la mina, donde se encontraban casi 790 personas en el momento del desastre.