Diferentes sectores sociales paraguayos llevan varias semanas en las calles exigiendo sus derechos al Gobierno de Federico Franco. Autor: PL Publicado: 21/09/2017 | 05:25 pm
ASUNCIÓN, octubre 11.— Una protesta coincidente de organizaciones campesinas, docentes e indígenas estremeció este jueves las calles principales de Asunción, la capital paraguaya, y culminó con demandas al Gobierno frente al Congreso paraguayo.
La múltiple movilización fue una de las más importantes efectuadas en los últimos meses y constituyó también escenario de numerosas consignas de rechazo al Gobierno de Federico Franco enarboladas por los participantes, reportó PL.
Los educadores salieron nuevamente a las calles, tras la huelga protagonizada en semanas anteriores, para reclamar el cumplimiento de los acuerdos logrados entonces y rechazar la aprobación de un calendario educacional que restringe derechos a actividades sindicales y protestas.
Blanca Ávalos, dirigente docente, dijo a Prensa Latina que el Ejecutivo aún no ha entregado al Congreso la solicitud del incremento del presupuesto para atender lo acordado y ello provocó la nueva demostración que se está realizando, paralelamente, en varios departamentos del interior del país.
El incumplimiento oficial abarca la vigencia plena del escalafón del sector, el pago del salario mínimo a más de 16 000 trabajadores de la educación que no lo reciben y bonificaciones adeudadas durante años.
Por su parte, un contingente de campesinos sin tierra del departamento de Cordillera, acamparon frente al Congreso y varios de ellos iniciaron una huelga de hambre por haber sido desalojados de los terrenos que ocupaban en esa zona.
Uno de sus dirigentes, Hernán Flores, afirmó que nuevos grupos de labriegos, en situación similar, vienen ya en camino hacia Asunción para unirse a ellos en esta medida de fuerza y denunció al Gobierno de Federico Franco como responsable de la situación actualmente enfrentada.
Los campesinos instalaron carpas en la Plaza de Armas, al costado del órgano legislativo, y allí se mantendrán, incluyendo las mujeres y niños, así como el grupo que dio comienzo a la huelga de hambre, hasta lograr la atención a sus pedidos por funcionarios y legisladores, según declararon.
Una columna de indígenas, por su parte, recorrió las vías del centro de Asunción, pronunciándose contra la decisión gubernamental adoptada en acuerdo con la multinacional estadounidense Monsanto, de utilizar para los sembradíos semillas transgénicas.
Los indígenas reivindicaron el uso de las simientes nativas, reclamaron el reconocimiento legal de sus comunidades en distintos departamentos y se pronunciaron por una reforma agraria integral.