PARÍS, marzo 15.— Francia y Reino Unido fracasaron en el intento de alcanzar un acuerdo en el Grupo de los Ocho (G-8) sobre una opción militar en Libia, ante el rechazo de Alemania y Rusia, y reticencias de EE.UU., según dio a conocer el ministro de Relaciones Exteriores francés, Alain Juppé.
La iniciativa no fue respaldada «simplemente porque algunos de nuestros socios se oponían a cualquier evocación del uso de la fuerza militar», dijo Juppé antes de precisar que el bloqueo en la ONU viene de China, país que rechaza una resolución que lleve a una injerencia en los asuntos internos de una nación, indicó AFP.
Por su parte, el canciller germano, Guido Westerwelle, expresó su esceptisismo respecto a una zona de exclusión aérea, lo que catalogó como intervención militar, mientras su par ruso, Serguei Lavrov, destacó que el uso de la fuerza puede ser contraproducente, reportó PL.
El G-8 (Alemania, Canadá, EE.UU., Francia, Italia, Japón, Reino Unido y Rusia), acordó no obstante, pedir a la ONU la imposición de sanciones económicas.
Mientras, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, se reunió en París con un representante del opositor Consejo Nacional de Transición (CNLT), autoproclamado como representante del pueblo libio. Según fuentes diplomáticas citadas por EFE, el encuentro fue «positivo» pero no cerró ningún compromiso, y aunque no se reconoce al CNTL como un «Gobierno en el exilio» , «se toman en serio las demandas» realizadas por su representante, que no fueron develadas. La cita abordó la manera en que Washington puede ayudar a los opositores y ello deja abiertas «todas las opciones», incluida la militar. No obstante, Clinton dijo que no se actuaría sin la aprobación de la Liga Árabe y del resto de países de la región, añadieron las fuentes.
También se supo que las tropas de Gadafi continuaron ganando terreno en Libia, y anunciaron una ofensiva contra Bengazi, bastión de la oposición, y el propio líder libio reiteró que se aplastaría al complot extranjero en su país.
En tanto, desde Bahrein, trascendió que el rey Hamad Ben Issa al Khalifa anunció el estado de emergencia por tres meses a partir de este lunes, en medio de protestas antigubernamentales y enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, en los que se registraron dos muertos y 200 personas resultaron heridas, informó AFP. El monarca encargó al comandante de las fuerzas armadas «restablecer el orden», recurriendo al ejército, la policía, las unidades de la guardia nacional y a otras fuerzas, «si fuera necesario», esta última alusión en referencia a las unidades sauditas y a los policías de los Emiratos Árabes Unidos desplegados en el archipiélago por decisión del Consejo de Cooperación del Golfo.