La periodista Adriana Sívori, enviada especial de Telesur, acaba de ser detenida por militares armados para impedir que siga dando cobertura a la represión que desde hace horas ocurre en las cercanías de la Casa Presidencial.
No lo puedo creer, estamos trabajando, nos llevan a punta de arma a un lugar desconocido, No voy a entregar el teléfono celular, dijo la periodista en lo último que se le escuchó en la transmisión de TeleSur, mientras las imágenes seguían mostrando la resistencia popular pese a que las calles están cubiertas de gases lacrimógenos.
TeleSur está expectante, decía la televisora latinoamericana, mientras ponía en pantalla el rostro de su periodista e informaba que les habían quitado sus pasaportes.