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Gayá y Sané podrían volver a verse las caras en un choque crucial. Foto: Getty Images Autor: Getty Images Publicado: 12/10/2022 | 11:13 pm
Según el Diccionario de la Real Academia Española, la palabra trampantojo define algo que es una «trampa o ilusión (óptica, sobre todo) con que se engaña a alguien haciéndole ver lo que no es. Si lo viéramos desde el punto de vista del fútbol, bien podríamos decir que un trampantojo es algo así como el grupo E de la Copa Mundial de fútbol Catar 2022.
La quinta llave de la justa incluye a dos monarcas: al tetracampeón, Alemania, y a España, que se tituló en 2010. Además, cierran el cuarteto dos pasajeros habituales como Costa Rica y Japón.
Si hacemos un análisis sicohistórico al estilo del novelista Isaac Asimov, lo más posible es que sus resultados dieran a ibéricos y germanos como los dos equipos que avanzarán a los octavos de final. Sin embargo, cuando hay una cancha de fútbol de por medio, la ciencia ficción tiene poco o nada que aportar.
Lógicamente, los reyes de 2014 (además de 1954, 1974 y 1990), atraviesan una fase de reconstrucción desde la salida del técnico Joachim Löw, razón por la cual irán a la nación asiática a disipar las dudas luego de marcharse tempranamente en fase de grupos durante el ciclo pasado.
Manuel Neuer, Thomas Müller, Joshua Kimmich, Ilkay Gündoğan, Serge Gnabry, Kai Havertz, Nico Schlotterbeck, Leon Goretzka, Leroy Sané, Antonio Rüdiger y Timo Werner deben encabezar la plantilla dirigida por Hansi Flick, quien buscará mantener la buena imagen que acumularon gracias a sus nueve sonrisas y un solo revés en las eliminatorias.
Por su parte, la Furia Roja viene de hacer una clasificatoria casi impecable, durante la cual ganó seis encuentros, empató uno y solo perdió ante Suecia (1-2), su escolta, posteriormente eliminado en la repesca. Los de Luis Enrique Martínez, con todo y sus polémicas convocatorias, son un grupo que lleva muchas horas de vuelo y que ya en la pasada EuroCopa llegó a semis luego de mejorar mucho sobre la marcha.
Con Sergio Busquets, Unai Simón, Pedri González, José Luis Gayá, Gavi, Rodri Hernández, Álvaro Morata y Ferrán Torres como piedras angulares del proyecto, los comandados por el asturiano son un conjunto sin la mística de aquel que maravilló al mundo entre 2008 y 2012, así que volverán a luchar contra aquello de «jugamos como nunca y perdimos como siempre» con tal de dejar su huella en la historia.
Ahora bien, luego están los ticos, que suman su quinta participación seguida en citas del orbe y saben lo que es echar por tierra los pronósticos, como hicieron en 2014 cuando terminaron líderes de su apartado tras vencer a Italia y Uruguay, además de empatar con Inglaterra.
Cuartos de Concacaf, esta vez los muchachos del colombiano Luis Fernando lograron su pasaje a través de la repesca internacional, en la cual vencieron 1-0 a Nueva Zelanda con gol de Joel Campbell, una de sus figuras. No obstante, estos hombres saben a lo que juegan y la falta de talento individual suelen suplirla con un estado físico envidiable y mucha disciplina en el parado.
Por último, los Samuráis Azules pudieran dar el salto esta vez. Ya amenazaron con algo así en Rusia, cuando en los octavos de final estuvieron venciendo a Bélgica por 2-0. Pero se les terminó cayendo el tinglado y perdieron 2-3.
Como segundos de Asia, por detrás de Arabia Saudita, los nipones tienen a excelentes futbolistas jóvenes como Takefusa Kubo, Takumi Minamino o Daichi Kamada, quienes, junto a Maya Yoshida, Yuto Nagatomo, Jun’ya Itō, Genki Haraguchi y el eterno arquero Eiji Kawashima, constituyen una presa difícil de doblegar.
