Con un doble en el sexto inning, Olber Peña empató momentáneamente el juego. Autor: Juan Moreno Publicado: 21/09/2017 | 06:19 pm
La lluvia, tan ansiada por muchos, se cobró la subserie completa entre Cienfuegos y Artemisa y apenas dejó celebrar dos de los partidos pactados entre Mayaquebe y Pinar del Río, el primero de ellos saldado con un final frenético a la altura del duodécimo inning y gracias a la Regla IBAF.
Con escenario en el Capitán San Luis vueltabajero, fue un tenso duelo de golpe por golpe, del tipo «cachumbambé», en el que a cada bando le tocó remar a contracorriente en pos del triunfo. Mientras que del lado anfitrión Yosvani Torres lanzaba siete entradas de dos carreras, el novato Yadián Martínez se las arreglaba para mantener en seco a los pativerdes durante cinco innings.
Pero el juego llegó empatado al límite, y fue necesario definirlo a partir de la fórmula «inventada» por Schiller, y en tales circunstancias los Huracanes marcaron dos veces. La respuesta no se hizo esperar, y después del habitual sacrificio, los sencillos de Yasser Julio González y el emergente Julio Alberto León propiciaron la paridad. Después del fly a la inicial de Ismael Gálvez todo parecía indicar que habría que reconstruir la misma escena, pero el cañonazo de Juan Carlos Arencibia sentenció la llegada de su equipo a la docena de éxitos, con que se acomoda entre la parte media de la zona de clasificación.
Fue este el extrainning número 18 que se ha jugado en la presente campaña y, de paso, el juego número 57 que se define por diferencia de una sola carrera.
También en la tarde hubo resultados relevantes, como los éxitos con los que granmenses y villaclareños lograron escaquearse de la escoba que pendía sobre sus cabezas. Para ello, los Alazanes presumieron de poder, pues los solitarios vuelacercas de Adrián Moreno y Carlos Benítez, más la impecable faena de Yanier González y Juan Ramón Olivera, fue todo lo que necesitaron para evitar el saqueo de los Piratas pineros. Los Naranjas sacaron a relucir su efectivo pitcheo, pues Alaín Sánchez y Edyabel García fueron indescifrables para la tanda tunera.
Pero sin dudas, fue la reacción de los Cocodrilos matanceros la noticia de la jornada. Los yumurinos, que andaban de capa caída, completaron una impresionante reacción al batir tres veces a los Gallos espirituanos, y en su valla, para más señas.
Mejoró sus prestaciones el zurdo Yoanni Yera, aunque a la altura del quinto capítulo fueron a su cuenta las dos anotaciones que pusieron en peligro su triunfo. Mas esta vez funcionó el pelotón de rescate, y ya el elenco matancero logró equilibrar su saldo de victorias y derrotas para mantenerse asediando el área privilegiada del escalafón. Más interesante no puede estar el resto del camino.