Los villaclareños aseguraron su boleto en Cienfuegos. Autor: Aslam Castellanos Publicado: 21/09/2017 | 06:15 pm
Como buenos Elefantes, los cienfuegueros fueron duros de matar en esta temporada nacional de béisbol para jugadores menores de 23 años. Pocos equipos completaron una campaña clasificatoria tan sobresaliente, pero el sistema de competencia diseñado por zonas —y a su vez la «fatalidad geográfica»—, terminó por pasarle factura a los sureños. Sus opciones descansaban sobre una barrida a Villa Clara, posibilidad que se deshizo este lunes con el triunfo que hizo inalcanzables a los Naranjas en la cima del grupo B.
No obstante, la novena de la Perla del Sur dio guerra hasta el último out del duelo celebrado en el 5 de Septiembre. Tenían en la trinchera opuesta al equipo de mejor balance en el campeonato y no tardó en demostrar su pegada. Al final del primer tercio la visita ya tenía ventaja de cinco anotaciones. Y a la altura del quinto episodio había sumado otra carrera con doblete de Leiva, imparable de Fuste y elevado de sacrificio conectado por Machado.
Sin embargo, los locales remaron contra la corriente y estuvieron muy cerca de cambiar la historia. En ese mismo inning descontaron tres, dos de ellas empujadas por el doblete de Francisco Tellería. Luego, a un out de capitular, el propio jardinero sopló su segundo doble de la tarde para propulsar otro compañero, y el hit de Daniel Pérez redujo la desventaja al mínimo. Pero con un roletazo a segunda base de Ernesto Gles se evaporaron todas las esperanzas y se hizo firme el avance de los villaclareños.
Imagino que no existe frase capaz de consolar a un grupo como este, pero al menos queda la sensación de que no está tan lejos, como alguna vez pensamos, el día que la nueva generación de cienfuegueros lleve a los Elefantes a otra postemporada de la pelota mayor. Sin dudas, muy buenas noticias.
También en la jornada pudo completarse el cuadro semifinalista del certamen, pero las lluvias caídas en la Isla de la Juventud aplazaron la celebración de los capitalinos, quienes solo necesitan un triunfo para montarse al tren.
El clima forzó también la posposición del otro desafío de la llave A entre el sotanero equipo de Pinar del Río y los Cazadores de Artemisa, cuyas opciones ni siquiera dependen de cerrar sin tacha la última subserie.
En el segmento C, la temprana clasificación no relajó a los líderes de Sancti Spíritus, quienes le recetaron una blanqueada como visitantes de los pequeños Tigres avileños, a todas luces con una suerte completamente opuesta a la de sus mayores. En el otro encuentro, Camagüey tensó el pulso por el segundo puesto al someter —a pesar de cuatro pifias— a los tuneros en el bosque de los Leñadores. El partido terminó igualado a uno en los primeros nueve episodios, pero a la altura del duodécimo los agramontinos marcaron un racimo de seis que los hizo imbatibles.
Otros con pasajes asegurados ya eran los santiagueros, punteros de la agrupación D. Pero aun así, los indómitos lucharon cuerpo a cuerpo con sus vecinos guantanameros durante 12 episodios, hasta imponerse con pizarra de 9-5.
En los restantes partidos de la fecha, y sin mucha trascendencia en sus desenlaces, Holguín le recetó un KO en ocho actos a Granma en partido correspondiente al pelotón D, mientras que en el B Matanzas se quedó corto para remontar a Mayabeque, y terminó cediendo por la mínima.