Contagiado con los cinéfilos —ya termina en La Habana el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano—, hoy tomo prestado el título de una película exquisita. Resulta que se acabó la maldición del estadio pinero Cristóbal Labra, considerado años atrás «el paraíso de los jonrones».
Entre martes y jueves no hubo jonrones en Nueva Gerona y este viernes tampoco ningún bateador pudo llevarse las cercas. Así, el equipo pinero se puso belicoso en cuanto llegó a su cuartel general.
Primero, la «guerrilla» de la Isla joven le ganó la serie a los campeones habaneros y luego comenzó con buen pie su duelo frente a Pinar del Río. Ni siquiera el astro Pedro Luis Lazo pudo poner las cosas en orden, aunque trabajó de forma impecable durante diez capítulos, con solo tres hits permitidos y 12 ponches.
Pero en cuanto Lazo terminó su labor, La Isla vio los cielos abiertos y marcó una raya en la parte baja del inning 13, frente al derecho Rogelio García. Mientras, los bateadores de Alfonso Urquiola fueron dominados por Omar Licourt (siete entradas) y Oscar Jacomino.
Como era viernes y ya hemos dicho que este día no hay piñata de batazos, tampoco cayeron jonrones en Cienfuegos y Las Tunas, en tanto se registró uno solo en Camagüey y la capital.
Por cierto, los Metros volvieron a guapear duro en su estadio «Changa» Mederos, pero Dayán García le cazó un buen lanzamiento al zurdo Maicel Díaz y puso la pelota en órbita para definir el partido. En la esquina opuesta disertó el mundialista Miguel Alfredo González, quien ya se ve como el extraclase del pasado torneo.