Santiago de Cuba venció por segunda vez a Viila Clara, mientras Ciego de Ávila dispuso de Holguín en cerrado pleito
La Habana y Pinar del Río resolvieron este lunes sus boletos para la semifinal occidental del béisbol cubano, tras eliminar con autoridad a la Isla y Sancti Spíritus, respectivamente.
Los pinareños definieron el choque en el tercer capítulo, cuando anotaron cuatro veces. El abridor espirituano Ángel Peña abandonó con las bases llenas y el relevista Yamichel Pérez enterró tres lanzamientos que costaron carreras.
Con tamaña ventaja, el astro pinareño Pedro Luis Lazo se divirtió en la colina y hasta regaló algunas rayitas. Para rematar, Padrón y Peraza burlaron las cercas en las postrimerías.
En Nueva Gerona, La Habana esperó para abalanzarse sobre la Isla en el quinto episodio, cuando el mentor pinero sustituyó demasiado pronto a Carlos Yanes. En la entrada hubo dos batazos claves, los jonrones de Ernesto Molinet, uno de ellos con la casa repleta.
También Yoelvis Fiss desapareció una pelota con el bote lleno, y desde ese momento los avileños armaron la remontada en el Calixto García. Ahí mismo Luis Miguel Rodríguez debió ser sustituido, pero los holguineros confiaron demasiado y el derecho soportó otro estacazo de tres carreras, firmado por Yordanis Pérez.
Fue un cubo de agua fría, aunque los locales amagaron en el noveno frente a Vladimir García. Esta noche les queda una carta bajo la manga, el supersónico Aroldis Chapman, pero el zurdo ya sufrió una mordida de los tigres.
Finalmente, Santiago puso las cosas en orden con excelente pitcheo de Norge Luis Vera, quien retiró a 22 hombres en línea hasta que Yuniet Flores le estropeó el juego perfecto en el octavo. En esa propia entrada, Ramón Lunar sopló un bambinazo y llevó dos cruces al pizarrón.
La llave del cuadroSi una posición resulta espectacular en el béisbol, esa es el campo corto. Por ello, la polémica sobre los mejores torpederos ha sido siempre recurrente.
Hoy traemos la controversia a nuestra página, porque en estos días de play off abundan las peñas en toda Cuba. Les cuento que dos hombres aparecen como líderes en average defensivo dentro del béisbol revolucionario: el villaclareño Eduardo Paret y el avileño Yorbis Borroto, ambos con 972. La diferencia estriba en que el primero jugó 18 temporadas y el segundo anda por su séptima.
Según los datos de nuestro estadístico Benigno Daquinta, detrás aparece el habanero Manuel Morales (971), quien tuvo muy buenas manos aunque pocas veces los aficionados le dan crédito en las discusiones. Tampoco a los tres que siguen: el cienfueguero Aldo Suárez del Villar, el espirituano Omar Arrozarena y el holguinero Royniel Varona, todos con 965. Por cierto, este último fue convertido en camarero por las necesidades de su equipo.
Luego viene otro trío que acumula 964 y siempre está en el centro de la polémica: los santiagueros Evenecer Godínez y Luis Miguel Navas, junto al capitalino Germán Mesa. A continuación, con un punto menos, figuran el pinareño Giraldo González y el matancero Armando Dueñas.
Los demás, por buenos que hayan sido —Puente, Jova, Arias, Verde, Tony González—, están distanciados en el escalafón.
Sin embargo, en el rango defensivo —recuerden que aquí se desechan los errores y entran a jugar los outs y las asistencias por juego—, Arias y Dueñas van delante con 5,83, seguidos por Germán (5,81). A distancia se ubican Borroto (5,68), Navas (5,66), Suárez del Villar (5,65) y Varona (5,64).
Como sucede con los camareros, esta fórmula también es más fiable para medir el desplazamiento y alcance de los torpederos. Así, ya se puede afirmar lo que de todas formas constituye una verdad de Perogrullo: Germán Mesa ha sido el mejor de todos los tiempos en el campo corto.
Pocas veces somos tan categóricos, pero este caso lo amerita. Es una de las cosas en que todos solemos estar de acuerdo, aunque en medio de la polémica no demos el brazo a torcer.
En fin, volvamos al presente y analicemos ahora el coeficiente de rendimiento integral (JAS) de los torpederos —a la ofensiva— durante la etapa preliminar de la actual serie. La tabla adjunta lo dice casi todo...