Cuando de probarse uno mismo se trata, a veces no tenemos ni idea de hasta dónde podemos llegar.
Un japonés, conocido por ser campeón de retos alimenticios de un sitio web, aceptó el raro desafío de comerse una hamburguesa con cien rodajas de cebolla cocida, especialmente preparada por una conocida cadena de comidas rápidas en Tokio.
El comilón finalmente no pudo completar el reto y abandonó antes de culminar su suculenta hamburguesa. No quiero ni imaginar el aliento que le quedó después.