El sismo alcanzó una magnitud de 7.1 grados y se encontraba a 440 km al sur de la Isla de la Juventud. Autor: Tomada de X Publicado: 09/02/2025 | 08:41 am
Era una tarde tranquila en Nueva Gerona, la capital de la Isla de la Juventud. Juana, sentada en su sala, disfrutaba de un momento de paz cuando, de repente, el suelo comenzó a temblar bajo sus pies. Un estremecimiento que no podía entender se apoderó de su cuerpo y, asustada, se levantó de un salto.
Sin pensarlo dos veces, abrió la puerta y salió en busca de ayuda.
A pocos metros, Ana estaba concentrada en su computadora, sumida en el trabajo. De pronto, la habitación se sacudió con una fuerza que le resultaba familiar. Había sentido esto antes, pero esta vez era diferente: más intenso y prolongado.
Su esposo, Roberto, observó las cortinas moverse con una intensidad inusual, extrañado al notar que el ventilador no estaba encendido. Al escuchar la sugerencia de Ana, se sentó en el piso, donde sintió el temblor más fuerte, como si la tierra reclamara su atención.
Las redes sociales comenzaron a llenarse de mensajes de vecinos que compartían sus experiencias. «Siento que me caigo» escribía uno; «¿Alguien más sintió eso?» preguntaba otro. La comunidad se unió en una especie de conexión virtual, todos buscando respuestas y asegurándose de que estaban bien.
Era un fenómeno compartido que tejía un lazo entre ellos en medio del temor y la preocupación.
Poco después, la red de estaciones del Servicio Sismológico Nacional Cubano emitió un informe: a las 6:23 p.m. hora local, se había registrado un terremoto perceptible.
Localizado en las coordenadas 17.44 grados de latitud norte y -82.50 grados de longitud oeste, el sismo había alcanzado una magnitud de 7.1 grados y se encontraba a 440 km al sur de la Isla de la Juventud, a una profundidad de 10 km.
Las provincias de la región occidental del país, desde Cienfuegos hasta Pinar del Río, también reportaron haber sentido el temblor.
Al parecer el segundo mes del año es bastante «movido» para esta parte de Cuba, hace exactamente dos años, el 8 de febrero de 2023 se registró un sismo perceptible también en Isla de la Juventud con magnitud de 5.5, situado a 600 km al suroeste de este Municipio Especial y fue el primero reportado de ese año, según publicó el periódico Granma.
Mientras los habitantes intentaban recomponerse y calmarse unos a otros, llegó la noticia tranquilizadora: no había evidencias de tsunamis. Sin embargo, el eco del susto permaneció en el aire, un recordatorio del poder incontrolable de la naturaleza y de cómo, en un instante, todo puede cambiar.
Juana regresó a su rutina en el hogar, mientras Ana y Roberto compartían miradas de alivio e iniciaban entonces la búsqueda de información para redactar esta crónica, ahora sin temblores naturales.