La Caravana Pastores por la Paz agradeció la hospitalidad del pueblo cubano. Autor: Orlando Perera Publicado: 04/07/2019 | 11:35 pm
Los miembros de la Caravana Pastores por la Paz rechazaron la activación del Título III de la Ley Helms-Burton, al considerarla una violación de las leyes internacionales, una pérdida de tiempo y una política injusta, además de ser expresión de un Gobierno que se encuentra distante de su pueblo.
Lo anterior fue expresado por la organización estadounidense solidaria con Cuba, en conferencia de prensa en la sede del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), en vísperas de su regreso a EE. UU. tras culminar una estancia de diez días que llevó a los 35 caravanistas a encuentros en La Habana, Cienfuegos y la Ciénaga de Zapata, entre otros lugares.
Gail Walker, directora ejecutiva de la Fundación Interreligiosa para la Organización Comunitaria IFCO-Pastores por la Paz (Estados Unidos), señaló que este 4 de julio —último día de su visita a la Isla— coincide con la celebración de la «independencia de Estados Unidos», la cual es símbolo de libertades: de prensa, de religión, de viajar. Sin embargo —aseveró— su Gobierno continúa imponiendo restricciones para que los ciudadanos estadounidenses que deseen viajar a Cuba lo hagan.
La activista recalcó que la Caravana continuaría viajando a Cuba a pesar de las prohibiciones, que considera «erróneas e injustas». También señaló que se mantendrán firmes con Cuba hasta que se levante el bloqueo y cesen las campañas difamatorias contra el pueblo y Gobierno cubanos. Al respecto, Gail Walker acotó que rechaza la mentira de la actual administración, que presenta a Cuba como país patrocinador del tráfico ilegal de personas.
Gail subrayó también que su organización continuaría viniendo a Cuba a expresar solidaridad y amistad; además de continuar su defensa por la soberanía y autodeterminación de la Isla, y no se rendirán hasta que se elimine el bloqueo genocida que ha sufrido el pueblo cubano por más de 50 años.
La líder de la Caravana insistió que seguirán declarando al amor como su única licencia para viajar, y ahora es el momento para poner fin a esa política restrictiva de EE. UU. hacia Cuba.
Por otro lado, Colin Stuart, un caravanista canadiense que por primera vez viene a Cuba, afirmó: «Luego de intercambiar con el pueblo cubano, regreso a mi país con la convicción de conversar con el Primer Ministro Justin Trudeau y con la Ministra de Asuntos Exteriores Christina Alexandra Freeland, para que reabran su oficina consular en La Habana y emitan las visas que los cubanos necesitan para viajar a Canadá».
Stuart agradeció en nombre de los demás caravanistas la hospitalidad y bondad de los cubanos, y aseguró que seguirá alentando la solidaridad con Cuba y Venezuela.
Por otra parte, el mexicano David López apuntó que la Revolución Cubana es «un faro de esperanza que ha inspirado a las organizaciones sociales» de América Latina y del mundo. Puso a Cuba como ejemplo de resistencia y habló de la necesidad de divulgar la realidad cubana en México.
López, quien integra la organización conocida como Los Panchos, pidió a Pastores por la Paz hacer visible las repercusiones del bloqueo económico, comercial y financiero, y ellos harán igual entre los ciudadanos mexicanos. Esto constituye una responsabilidad, llegar a sus pueblos, colonias e informar que acciones toma Estados Unidos contra Cuba, puntualizó.
Gail Walker —hija del fundador y alma de este movimiento solidario, Lucius Walker—, culminó la conferencia destacando que la organización que representa estará guiada siempre por la idea de su padre: ganar-ganar, es decir, si nos paran ganamos, y si no lo hacen también.
La 30ma. edición de la Caravana de la Amistad Cuba-Estados Unidos de Pastores por la Paz concluye hoy viernes su presencia en nuestro país luego de productivas jornadas en la Isla, entre las cuales se destacaron los encuentros con el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el presidente del Parlamento cubano, Esteban Lazo Hernández.
Durante la estancia de diez días visitaron escuelas, hospitales e iglesias; intercambiaron con el pueblo, con veteranos de la guerra contra el colonialismo en África y con artistas e intelectuales cubanos.
Los 35 integrantes de la Caravana hicieron patente su agradecimiento al Centro Martin Luther King, al Consejo de Iglesias de Cuba y al Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), sus anfitriones en la Mayor de las Antillas.