LAS TUNAS.- A pesar de las funestas secuelas que suelen dejar tras su paso los ciclones tropicales, los tuneros se quedaron con los deseos de que el huracán Sandy les hiciera la visita, principalmente por la sed que experimentan los embalses del territorio, hoy a medias de su capacidad de llenado.
Según reflejan las escalas de los pluviómetros, en esta capital provincial apenas se registraron 38 milímetros de precipitaciones durante las últimas 24 horas. Y los vientos casi no fueron perceptibles: 15 kilómetros por hora.
El municipio de Puerto Padre reportó en las primeras horas de la mañana de hoy rachas sostenidas de viento de hasta 85 kilómetros por hora y lluvias nada significativas de solo 14 milímetros. El Atlántico está todavía picado, y sus olas arremetan sobre el muro del malecón de la ciudad.
En la provincia fueron protegidas más de 26 000 personas, alrededor de 25 000 de ellas en casas de familia y unas 800 en 21 centros de evacuación. La Facultad de Ciencias Médicas Zoilo Marinello acogió a pacientes de insuficiencia renal crónica –incluyendo niños y embarazadas- para evitar que perdieran sus sesiones periódicas de hemodiálisis.