El Comandante Delio Gómez Ochoa, jefe del histórico IV Frente, encendió la llama eterna en el obelisco que perpetúa la memoria de los caídos en esa gesta forjada en nuestras luchas
MIR, Calixto García, Holguín.— «La historia forjada en nuestras luchas, la protagonizada por el IV Frente Simón Bolívar y la de nuestros días no será olvidada jamás», afirmó ayer aquí Miguel Díaz-Canel Bermúdez, miembro del Buró Político y presidente del Consejo de Defensa Provincial en Holguín, en el acto conmemorativo por la constitución de ese contingente rebelde, hace 50 años.
Minutos antes el Comandante Delio Gómez Ochoa, jefe del histórico IV Frente, patentizaba esa misma idea al encender la llama eterna en el obelisco que perpetúa la memoria de los caídos en esa gesta, la cual legó, entre otros acontecimientos, la liberación del poblado de Mir, el primero en el llano.
La trascendencia de aquel histórico acontecimiento para la victoria definitiva tuvo como punto culminante la orden dada por Fidel desde la Sierra Maestra, a fines del año 1958, de combinar en un mismo frente las acciones de las columnas 12 y 14 que operaban en los llanos de Holguín, Las Tunas y parte del Camagüey.
Al intervenir ante combatientes del frente guerrillero, integrantes de las FAR y el MININT y pobladores de Mir, la camilita Tania Estupiñán expresó que la juventud de hoy también está haciendo historia y que una gran parte del orgullo que sienten como patriotas procede precisamente de saberse continuadores de tales tradiciones de lucha.
Aquel mismo poblado liberado por los rebeldes, donde enseñoreaban el hambre y el desalojo, ha crecido cuatro veces numéricamente, cuenta con cooperativas para la producción agrícola, un policlínico, un hogar materno, ocho consultorios del médico de la familia y una sala de rehabilitación.
«Durante 13 años no se reportan muertes maternas y en cuatro no existe mortalidad infantil», señaló el Primer Secretario del Partido en Holguín.
La ocasión fue propicia para dejar inaugurado en Mir el Museo Central IV Frente Simón Bolívar, así como la reapertura de más de 20 instalaciones que fueron remozadas, entre estas la Casa de la Cultura.
El acto estuvo presidido además por el general de cuerpo de ejército Ramón Espinosa Martín, jefe del Ejército Oriental, la general de brigada Teté Puebla, y la segunda secretaria de la UJC, Liudmila Álamo Dueñas.