Estas vacaciones son diferentes para los habitantes de las 52 comunidades y asentamientos pesqueros del país, donde sus niños y adolescentes tienen la oportunidad de asistir a cursos de verano, una nueva modalidad que ha puesto en práctica el Ministerio de la Pesca.
Antonio Barroso, funcionario de dicho organismo, reveló a este diario que están previstos seis talleres: artes de pesca, medio ambiente, acuicultura, camaronicultura y ciclo de vida de la langosta y de especies de escama, los cuales están relacionados con la vida de esos lugares.
«Los cursos comenzaron a impartirse el pasado 7 de julio. Duran dos semanas y están dirigidos fundamentalmente a pioneros de secundaria, aunque pueden incorporarse niños más pequeños y también sus padres. Queremos que esto sea una opción para toda la familia.
«Para ello se utilizan las instalaciones de los joven club y las salas de video-club de esas comunidades. Es un trabajo que coordina la Unión de Jóvenes Comunistas y se ha preparado con el gobierno. Al finalizar cada estudiante recibirá un certificado de participación».
Según explicó Barroso, esta iniciativa tiene como antecedente un programa de actividades que se realizaron durante las vacaciones del año 2007, cuando la Empresa de Campismo Popular llevó a estos lugares una serie de ofertas recreativas, culturales y deportivas.
«En esta ocasión —dijo— se suman los cursos de verano como una opción destinada a todos los asentamientos donde exista una instalación pesquera, sin importar su lejanía.
«Junto al levante de veda está el levante del verano en el Ministerio de la Pesca, pues estamos inmersos ahora en la captura de la langosta. En estos sitios la pesca es el centro, y por eso los talleres son también un medio de fomentar la vocación hacia esas labores».