Santiago de Cuba.— Jóvenes integrantes de la Brigada José Martí de Instructores de Arte (BJM), emprenderán en todo el país un proyecto para el embellecimiento y transformación del entorno visual de los municipios cubanos mediante la pintura y el emplazamiento de murales.
Así lo dieron a conocer en esta ciudad Irisday Ramírez y Lisset Ametller, coordinadora y presidenta de la BJM, respectivamente, quienes encabezaron aquí la asamblea de balance de esa estructura juvenil que eligió y dejó constituido su nuevo Consejo provincial.
Comunidades, centros de producción y servicios, parques, plazas, instalaciones recreativas, y, sobre todo, las escuelas, que constituyen hoy el escenario principal de la labor de los 13 100 integrantes de la BJM en la Isla, recibirán los beneficios de la idea, que tiene entre sus propósitos el de dar sentido artístico a la propaganda gráfica.
Bajo el nombre de Imaginarte, el proyecto saluda el 50 aniversario del triunfo de la Revolución e involucrará además a las estructuras de la Asociación Hermanos Saíz y artistas de la plástica de diferentes localidades, con el propósito de fundir juventud y experiencia.
«La intención es que los murales se parezcan a los sitios en que estén enclavados, y, por tanto, sean la expresión de las costumbres y tradiciones de esas localidades y puedan servir también para la promoción y reforzamiento de los valores históricos, culturales y sociales de nuestros territorios», argumentaron las dirigentes.
Con esta propuesta y durante todo el año, según la dirección de la BJM en el país, la nueva fuerza de los instructores de arte empezará a hacer sentir su impacto más allá de los centros estudiantiles, al poner las tendencias más contemporáneas de la plástica en función de la educación del gusto estético de los cubanos de todas las edades, bajo la máxima de llegar a la mayor cantidad de lugares posibles.
La superación del nuevo instructor de arte, como vía para elevar su papel en escuelas y comunidades y alcanzar el protagonismo al que está llamado por la sociedad, tal y como lo demostró la asamblea santiaguera, se encuentra entre los temas de mayor prioridad para el novedoso movimiento juvenil.