Frente al espejo
«Mi estimado Luis Sexto: Acompaño sus escritos desde que era joven y “lector polilla” de la revista Bohemia. Ahora, con la informatización, podemos no solo leer sino también opinar y conversar con el periodista. Es cierto que la igualdad fue y continúa siendo la mayor conquista de la Revolución (Distorsión de la conquista, Luis Sexto, sección Coloquiando, 30 de octubre). Infelizmente, por muchos motivos ella derivó en el igualitarismo y ahí llegó junto el paternalismo…
«Una sociedad no será más justa porque divida todo en partes iguales para todos, sino cuando a todos les dé igualdad de condición y de lugar… El igualitarismo corroe y divide: no es y nunca será lo mismo alguien que se supera la vida toda y alguien que no estudia (porque no quiere) y vive de realizar turbios y dudosos negocios. Esas dos personas nunca podrán ser iguales… Es verdad que los tiempos y los lectores son otros, pero el igualitarismo continúa siendo el mismo e insiste en sobrevivir. Hay ocasiones en que cambiar una forma de pensar y actuar lleva tiempo. Eliminar el igualitarismo-paternalismo no será fácil porque está enraizado en la sociedad cubana. Incluso, puede que eliminarlo de raíz sea un largo camino. De cualquier manera, el éxito o no de esa tarea, que es de todos, solo se conseguirá dando el primer paso». (Alfredo Viamonte)
«Hermoso artículo, Luis, muestra de la gran sensibilidad humana que, a pesar de los pesares, muchos cubanos no han perdido (El 992, Luis Raúl Vázquez, 3 de noviembre). Ojalá que ejemplos como este lleguen a gente egoísta e indiferente que anda suelta por ahí». (Ale)
«Para mí sus columnas son lo mejor de la prensa cubana (Así era Ignacio Agramonte, Ciro Bianchi Ross, página de Lectura, 25 de octubre). La leo todos los domingos y creo sin dudas que todos los periodistas en Cuba debieran aprender no solo de usted, sino sobre todo de sus trabajos». (Francis)
«Solo unas líneas para agradecer el trabajo publicado por usted el pasado domingo 18 de octubre, dedicado a Maricusa Cabrera (Aquella que fui, Edel Lima Sarmiento). Me conmovió esa confesión de la artista: “¿Sabes? Hace tiempo te esperaba…”. Resulta justísimo recordar a todos aquellos nombres, modestos a veces, otras no tanto, todos prácticamente olvidados pero que dieron su mejor esfuerzo y contribuyeron a moldear nuestra cultura. Ya lo dijo el Mayor de los cubanos: “Honrar, honra”». (Alberto Acosta-Pérez)