Acuse de recibo
Uno cree conocer a fondo al cubano. Unas veces exagera sus virtudes y bondades con enfoques umbilicales; otras lamenta sus proverbiales defectos. Pero cuando un compatriota pide auxilio, la solidaridad súbita de este pueblo no se hace esperar.
El pasado 29 de junio, Yamilé López Viera, quien padece una severa hipoacusia que amenaza su desempeño profesional, agradecía aquí desde Mayarí Abajo, en Holguín, la atención esmerada que recibió en el Centro Auditivo de esa provincia, donde le hicieron los moldes que enviaron al Centro homólogo de La Habana.
Pero luego nunca pudo adquirir las prótesis correspondientes en Holguín. Y sufriendo su incomunicación, clamaba por la solidaridad de quien disponga de estas y no las use, y las pueda ceder o vender.
Yamilé vuelve a escribir para contar con alegría que ya dispone de prótesis auditivas. Inmediatamente que se reveló su mensaje aquí, comenzó a recibir llamadas telefónicas de toda Cuba, solidarizándose con ella.
«Agradezco al matrimonio de Pedro y Norma, de Santos Suárez, en La Habana, quienes ese mismo día contactaron conmigo y me enviaron unas prótesis que conservaban en su hogar; a Inalvis Fernández, de Banes, que me obsequió unas prótesis que eran de su papá, y es su deseo que yo me reincorpore a la vida laboral y social normalmente.
«De igual forma a la señora Oralia Purón, de Mayarí, quien atentamente a través de una vecina se comunicó conmigo para ayudarme. A Milagros Vargas y su familia en Bayamo, Granma, quienes gestionaron en el Centro Auditivo de esa provincia un turno y prótesis para mí; y a ese receptivo colectivo encabezado por su dirección, quienes no dudaron en brindarme su solidaridad.
«En la Dirección Provincial de Alimentos en Guantánamo mi amor eterno, por sus palabras de aliento y por querer compartir sus prótesis conmigo, a la compañera Yalexis Pozo, quien padece lo mismo. Y a todo el colectivo de ese centro laboral, quienes le mostraron el periódico para que conociera mi historia y me ayudara. Créame que cuando recibí su llamada fue de las personas que más me motivó, por su historia parecida a la mía: aun con limitaciones no ceja en su empeño y se mantiene como yo, trabajando y activa al servicio de esta sociedad y de Cuba.
«No puedo dejar de mencionar a mis compañeros de trabajo, por su ayuda y comprensión en todo momento; y a los compañeros de la Dirección de Farmacias y Ópticas de mi provincia; a la Directora del Centro Auditivo de Holguín, quien se comunicó conmigo y me citó para el lunes 4 en el Centro Auditivo, gestionando una prótesis para mí y me la colocaron.
«Agradezco en el alma tal gesto altruista que caracteriza a los médicos y personal de la salud de nuestra Cuba. Desvalidos no quedaremos ninguno; conozco y comprendo las carencias y dificultades económicas por las que atravesamos y sé que como yo hay miles de personas con limitaciones similares. Pero mi caso demuestra que siempre se puede; los felicito porque como siempre mantuvieron su trato afable y su empeño de ser cada día mejores.
«Lloré con ellos. Escuchar con nitidez es hermoso después de tanto tiempo con serios problemas auditivos. Y porque comprendo cuánto me cambiará la vida, porque puedo seguir trabajando, superándome como deseo, y atendiendo las necesidades de mis hijas, en fin insertarme en la vida social normalmente porque siempre he sido activa (...). No concibo mi vida sin Cuba».
Yamilé agradece también a este redactor lo que es solo un deber profesional, y concluye manifestando su dicha por haber conmovido a muchas personas: «Mil gracias, me despido con el orgullo infinito de ser cubana, de vivir con todos ustedes. Cuba es y será siempre ejemplo ante el mundo por la más linda característica que la define: la solidaridad».
Y también plasma su gratitud Angelina Vasallo, la señora del Cerro, en la capital, que el pasado día 28 de junio clamaba por alguien que poseyera el medicamento ácido tranexámico, actualmente en falta, e imprescindible para su padecimiento: trombosis plaquetaria.
«Mi agradecimiento más profundo por la rápida respuesta desinteresada y generosa de quienes se han acercado para brindarme el mismo. Nunca lo olvidaré. Se ha demostrado una vez más el profundo sentido de humanidad que hay en mi Cuba querida», concluye.
No obstante, esperamos que el Ministerio de Salud Pública pueda responder esclarecedoramente por la parte que le corresponde institucionalmente en ambos casos. Lo agradeceríamos también.