El equipo antillano hará su debut en el torneo frente a los locales taipeyanos. Autor: WBCS Publicado: 21/07/2025 | 08:17 pm
Una larga travesía aérea deberán realizar los más pequeños representantes del béisbol cubano, quienes, este martes, partirán hacia las lejanas tierras de Tainan, en Taipéi de China, para vivir la pasión auténtica que siempre trae implícita una Copa Mundial sub-12.
Los nuestros tendrán un debut difícil y, seguramente, a estadio lleno. Tan pronto como el próximo 25 de julio los cubanitos enfrentarán al conjunto local, uno de los equipos históricos a nivel planetario en esta categoría.
Más allá de los taipeyanos, el grupo A del torneo luce bien enrevesado y complejo de vaticinar. Otro hueso duro con el que la Mayor de las Antillas topará seguido de los anfitriones es el siempre poderoso Japón. Los samuráis del sub-12 nunca han ganado una Copa Mundial, pero, que eso no nos engañe ni nuble el pensamiento, porque los nipones casi siempre se las han arreglado para estar entre los cuatro grandes.
Salir librados en las dos primeras batallas de la justa con al menos un éxito sería magnífico para las aspiraciones antillanas de pasar a la siguiente ronda. Los demás contendientes de la llave A (México, Alemania y Australia) son, igualmente, escollos de nivel, aunque más asequibles para los cubanitos.
El otro apartado, el B, lo comanda el rey absoluto de esta categoría: Estados Unidos. Junto a los norteños sobresalen el seleccionado de Corea del Sur, República Dominicana, Panamá, Sudáfrica y República Checa.
A la ciudad de Tainan hacen el viaje 18 peloteritos de lo que más vale y brilla en esas edades en la Mayor de las Antillas, quienes estarán comandados por el mentor Raúl Rodríguez Palacio, y los entrenadores Vladimir Vargas, Yuniesky Pérez y Lázaro Humanes.
El propósito, según ha confirmado el propio director técnico, no puede ser otro que el de acercarse a las mejores actuaciones de un elenco nacional en la historia de las copas mundiales sub-12.
Aunque el propósito sea ambicioso, en estas categorías el destino a corto plazo ―dentro de un torneo tan fugaz― por lo general es bastante impredecible. Cualquier cosa puede suceder, porque hablamos de niños que enfrentarán una presión distinta por primera vez.
Los cubanitos tienen talento, sin embargo, para hacer acto de presencia, al menos, en la ronda de definiciones. Lo importante para ellos, y seguro que así se los transmitió el cuerpo técnico a los muchachos, es salir a divertirse en cada juego. Para Cuba, este evento adquiere otro matiz, pues retorna a una cita planetaria de la categoría luego de quedar ausente en la pasada versión del torneo.
Será la octava ocasión que se disputen este evento planetario, y la cuarta que se celebra en el Estadio Internacional de Béisbol y Centro de Entrenamiento Asia Pacífico en Tainan. Resulta curiosos el hecho de que Taipéi de China sea la única sede anfitriona del torneo desde su inicio en el año 2011.
A esta edición regresan diez de los 12 participantes de la justa de 2023. Solo Cuba y Sudáfrica no clasificaron a la pasada versión de la Copa Mundial .sub-12.