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Yasmani Insua es la principal figura del pitcheo sureño. Autor: Aslam Castellón Publicado: 28/08/2019 | 10:58 pm
Después de la temporada 52, cuando Cienfuegos perdió en una histórica semifinal ante Villa Clara, y especialmente frente a un Freddy Asiel Álvarez que le colgó tres lechadas, nunca más un equipo de esa provincia ha vuelto al top ten y en los últimos años se ha dedicado a la reconstrucción del conjunto, una estrategia paciente que comienza a rendir frutos en la manada de Elefantes.
Aquel grupo sufrió una gran desarticulación: tres son actuales estrellas en la Gran Carpa de la MLB: José Dariel Abreu, Yasiel Puig y Yoan Moncada, mientras Pavel Quesada optó por regresar tras un periplo por el Caribe. Sin embargo, una nueva hornada de jugadores de las categorías formativas fue asumiendo protagonismo y hoy son puntales en el comportamiento que va teniendo el equipo en la serie nacional 59.
En las dos ediciones pasadas del torneo sub-23 llegaron a la semifinal y ahora están pugnando por no morir cuando concluya el primer segmento de la temporada élite. Antes del juego de ayer, tenían balance de nueve éxitos y cinco derrotas, y se ubicaban en el cuarteto de la vanguardia.
Pavel es una de las bujías. A su experiencia suma muy buena línea ofensiva (.438/.578/.729), que podrían, incluso, despertar el interés de los seleccionadores nacionales para el Premier 12.
César Prieto es una de las estrellas emergentes de los Elefantes. Desde que comenzó su andar en este deporte, se vislumbró su proyección y el año pasado descolló como refuerzo de Villa Clara, y luego se ganó un puesto en el equipo Cuba, que parece no dejará en mucho tiempo.
Entre la combinación de jóvenes y experimentados sobresalen por sus números a la ofensiva: Juan Miguel Soriano, Edwin Vassel, Yusniel Ibáñez, Richel López y Luis Vicente Mateo.
El ataque de los Elefantes es uno de los mejores en la justa. Exhiben línea de .296/.406/.459, antes de ayer eran los únicos con un porciento de embasado por encima de .400 y también tenían el más alto SLU, lo que se traduce también en un elevado Poder Aislado (SLU-AVE): 163. Habían sacudido 13 jonrones, con cinco triples y 25 dobletes, líderes en la producción de extrabases, y muestran una de las mejores disciplinas en home colectivamente: reciben 1.35 boletos por cada ponche que se toman, en un torneo en el que la media es 0.85.
Con esa ofensiva y una defensa de .986, la más hermética del torneo hasta el juego 14, apoyan un pitcheo que trabaja para 4.88 de efectividad, por debajo de la media y casi siempre sus lanzadores están en complicaciones, pues embasan a 1.59 hombres por inning.
En su rotación descuella Yasmany insua (3-1, 1.80 de promedio de carreras limpias), mientras su bullpen ha ganado tres partidos, pero ha desaprovechado tres de las cinco oportunidades de salvar juegos que ha tenido. Se espera un mayor aporte del zurdo Leorisbel Sánchez, con gran experiencia como relevista.
El año pasado, Alaín Álvarez, el mentor de los sureños, auguró en diálogo con JR que esta debía ser la temporada consagratoria de la nueva manada. Hasta ahora va cumpliéndose su palabra para bien de su afición y del béisbol cubano.
