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De todo un poco en pelota

La Serie para menores de 23 años está bastante interesante en lo que a rivalidad se refiere, mientras los números no vislumbran nada prometedor en el futuro y por lo que reflejan los partes diarios hay una campaña por meter en cintura a los indisciplinados

Autor:

Norland Rosendo

El béisbol cubano sigue rodando aunque no a la velocidad deseada ni con el abolengo que tuvo antaño. Rueda, y eso le basta a algunos. Mientras en casa aumenta la rivalidad en la serie sub-23, pocos aficionados les dedican tiempo a enterarse de cómo anda el entrenamiento para Barranquilla y  hoy arranca la Liga Intercondados de Ontario (IBL) donde jugarán cuatro insulares con las Panteras de Kitchener.

Al otro lado del Pacífico, Alfredo Despaigne ya comenzó a empinar pelotas, pero tiene que apurarse, porque otros se le han adelantado esta temporada en conectar vuelacercas en el exigente circuito japonés, y a su regreso a Cuba después de cumplir su breve contrato en Panamá, el explosivo e inquieto jugador tunero Yosvani Alarcón anunció que el día 15 se incorporará a Orientales en la serie preparatoria de la cual deben salir varios miembros de la selección nacional para los Juegos Centroamericanos y del Caribe, y comentó a la prensa local que el arbitraje de Cuba no se compara con el que vio en el Istmo. Aquel, dijo, es peor. Mejor saberlo por otros que verlo…

La Serie para menores de 23 años está bastante interesante en lo que a rivalidad se refiere, mientras los números no vislumbran nada prometedor en el futuro y por lo que reflejan los partes diarios hay una campaña por meter en cintura a los indisciplinados. Con frecuencia algunos de los atletas o entrenadores se van a las gradas antes de tiempo.

En Occidente, los Elefantes de Cienfuegos mantienen sus pisadas fuertes, aunque están acosados por pinareños y pineros, en una porfía por dos pasajes a la semifinal. A ese trío que nunca ha llegado a los play off le siguen unos matanceros que sí saben lo que es la postemporada, pero que les deben a sus aficionados, como sus hermanos mayores, un alegrón dorado que no gozan desde el milenio pasado con los míticos Henequeneros de Gerardo, Sile, Junco.

Por el Oriente, el tiempo no está despejado aunque el sol salga por allí primero. Con los últimos resultados, Granma no tiene tampoco nada seguro y ahora los bicampeones de Santiago de Cuba se le han vuelto a poner a un milímetro de la cima, aunque por esos lares el pelotón de la vanguardia incluye a tuneros, espirituanos y holguineros. Ojalá la afición se embulle para que los muchachos no se sientan tan solos.

Más al norte, en Canadá, las Panteras del paracortos Yorbis Borroto y los lanzadores Noelvis Entenza, Jonder Martínez y Miguel Lahera debutan hoy, un poco antes que la Liga Can-Am, donde jugarán Yordan Manduley y Lázaro Blanco, cuyo inicio está previsto para el 17 de mayo.

Seis batazos de vuelta completa ha conectado Alfredo Despaigne en la Liga del Pacífico con los campeones de la temporada pasada en las Grandes Ligas de Japón, Halcones de SoftBank. Desde su primer fichaje en 2014, acumula 95 bambinazos en el béisbol nipón de máximo nivel (54 con el     Chiba Lotte y los demás con los Halcones). Hay que estar       pendiente en las próximas madrugadas (por la diferencia de hora), porque el cien está al doblar de la esquina.

Si el año anterior estaba entre los máximos jonroneros, ahora tiene la mitad del líder, Hotaka Yamakawa, y tres menos que Tetsudo Yamada y Wladimir Balentín.

Interesantes han sido las recientes declaraciones de Alarcón a la prensa de Las Tunas. Empecemos por esto: «A veces nos quejamos de nuestro arbitraje, pero el de Panamá es mucho, mucho más malo que el nuestro».

Coincido con él en otra de sus afirmaciones: «Creo que debo estar entre los regulares de la selección nacional».

Aunque se está tomando unas pequeñas vacaciones con la familia, dice que ya visitó el estadio Julio Antonio Mella y realizó un poco de entrenamiento: «Comencé a batear y a hacer gimnasio. El día 15 de mayo me incorporo al equipo de Orientales de la Serie Especial de Béisbol para dar mi apoyo y representar a Las Tunas».

Y no sería justo si no dedicara unas líneas a un «vecino» de Cuba: el dominicano Albert Pujols, quien disparó su hit 3 000 en las Grandes Ligas estadounidenses y junto al también sensacional Hank Aaron son los únicos integrantes del club de los 3 000 hits, 600 jonrones y 600 dobles en la historia de la MLB. No hay dudas de que Pujols es uno de los orgullos latinos en la Gran Carpa.

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