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¿Comenzó ya la recuperación de Bruzón? Esperemos que sí. SANTA CLARA.— Desde hace más de un año, el Gran Maestro Lázaro Bruzón mantiene un desempeño discreto en los torneos internacionales, en contraste con lo que se espera de su indiscutible talento.
A pesar de exhibir un Elo de 2608 puntos, el segundo del país, se pensaba que a estas altas alturas tendría una mejor clasificación, pues había demostrado que su aspiración de estar en la élite tampoco era una simple quimera.
¿Qué le ha ocurrido? Con solo 24 años de edad, resulta difícil creer que los mejores tiempos ya pasaron para él, que llegó a donde iba a llegar, que está acabado.
En 1999, Bruzón realizó dos normas de Maestro Internacional en sendos torneos celebrados en la provincia Granma y en Unión de Reyes, Matanzas. Luego completó el título por su actuación en el Campeonato de Cuba. Ese mismo año, conquistó además el de Gran Maestro, tras su buen desempeño en el Memorial Capablanca y el Guillermito García, de Santa Clara. Entonces parecía que tocaba el cielo.
Ahora lo vi contento, tras ganar el torneo ajedrecístico de la IV Olimpiada del Deporte Cubano, y fui a su encuentro para que él mismo despejara las dudas.
«Este resultó un buen torneo a pesar de que es un ajedrez activo. Hubo muchas partidas interesantes y lo distinguió la combatividad», confesó.
—¿Es cierto que hubo discrepancias por este sistema de competencia?
—Sí. Se trata de un torneo de partidas rápidas, de juego activo, que no requiere de tanto rigor. Incluso, no cuenta para el Elo, pero también es ajedrez.
—¿A qué se debe tu descenso?
—Nada, una mala racha que tengo.
—¿En qué fase está la falla: en la apertura, el medio juego o los finales?
—Es muy complicado, no podría decirte un factor en específico, más bien son varias cuestiones.
—¿Cuáles?
—No tienen que ver directamente con la técnica del ajedrez. He tenido problemas de salud y otros personales que han influido.
—¿Ahora mismo cómo aprecias tu juego?
—Estoy en un franco proceso de recuperación para lograr mejores resultados.
—¿Y la aspiración de llegar a los 2700 de Elo?
—Sigue siendo mi objetivo
—Por fin, ¿eres de Holguín o de Las Tunas?
—De las dos partes. Nací en Holguín, un dato que muchos desconocen, y a los seis años fui a vivir a Las Tunas, donde aprendí a jugar el ajedrez.
