Con una mueca de resignación, el armenio Levon Aronian (izquierda), anterior monarca, acepta la derrota y extiende su mano al ruso Dmitry Jakovenko. Foto: FIDE Este miércoles, la Copa del Mundo de ajedrez se quedó sin grandes favoritos. Así mismo. Resulta que los últimos dos «cabezones», el armenio Levon Aronian (2741) y el ruso Peter Svidler (2732), fueron eliminados en el epílogo de los octavos de final.
Aronian, monarca defensor, cayó en la primera partida de 25 minutos frente al ruso Dmitry Jakovenko (2710), en tanto Svidler perdió la segunda con el estadounidense Gata Kamsky (2714). Mientras, el vigente campeón de Rusia, Evgeny Alekseev (2716) le ganó los dos cotejos semirrápidos a su compatriota Evgeny Bareev (2653) y avanzó igualmente a la siguiente fase.
Así, en el inicio de los cuartos de final, Kamsky rivalizará hoy con el ex campeón mundial ucraniano Ruslan Ponomariov (2705), Jakovenko se medirá con el español Alexei Shirov (2739) y Alekseev tendrá tablero por medio al benjamín ucraniano Sergey Karjakin (2694). Finalmente, el niño prodigio noruego Magnus Carlsen (2714) chocará contra el búlgaro Ivan Cheparinov (2670).
A juzgar por el ELO de estos hombres, tal vez no se deba hablar de sorpresas, pero casi nadie en el mundo los daba como candidatos al título a pesar de su talento. Shirov y Kamsky, los de mayor experiencia, siempre han quedado a las puertas de los grandes resultados. Y el resto pertenece a una joven generación de estrellas que va quemando aceleradamente las etapas, acaso a tono con los tiempos que corren.