En el Museo de la Revolución, antiguo Palacio Presidencial, el estudiantado universitario cubano alzó su voz este jueves para honrar la memoria de aquellos jóvenes del 13 de Marzo liderados por José Antonio Echeverría y nucleados en el Directorio Revolucionario.
«Este sitio, testigo de la historia de lucha y la resistencia de nuestro pueblo, nos convoca a reflexionar sobre el valor de los jóvenes que, con profunda convicción patriótica, decidieron tomar el Palacio Presidencial y la emisora Radio Reloj», expresó Ernesto Alejandro Gómez Pérez, organizador de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU).
Aquel día, las acciones temerarias de la FEU marcaron el punto más alto de la radicalización de la lucha del estudiantado, que ya no solo combatía desde las aulas. Permitió comprender la virtud de la Revolución que se gestaba, inevitablemente, en Cuba, dijo. Destacó, además, que, aunque la acción no logró sus objetivos inmediatos, encendió la llama de la rebeldía, dejó una huella imborrable y demostró que las ideas justas no pueden ser silenciadas ni con la muerte.
Fueron colocadas ofrendas florales a nombre del General de Ejército Raúl Castro Ruz, líder de la Revolución Cubana, de Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, así como de los Consejos de Estado y de ministros.
Presidieron el homenaje Susely Morfa González, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Jefa del Departamento de Atención al Sector Social; Eduardo Martínez Díaz, viceprimer ministro de la República de Cuba; el ministro de Educación Superior, Walter Baluja García; las máximas autoridades políticas y gubernamentales de la capital; Dilberto González García, segundo secretario del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas; el presidente nacional de la FEU, Ricardo Rodríguez; así como Otto Hernández Fernández, último sobreviviente de la toma de Radio Reloj.