Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

¿A qué se dedican los jóvenes cubanos?

Muchos descansan en el verano. Otros siguen al pie del cañón para garantizar importantes servicios y la producción que necesita nuestro pueblo. Con un grupo de ellos, en su mayoría jóvenes, dialogó la Primera Secretaria de la UJC en el país

 

Autor:

Yuniel Labacena Romero

Los que quieran saber qué hace la juventud cubana, a qué se dedica todos los días, cómo piensa y aporta a este país…, tienen que recorrer y dialogar con quienes están, por ejemplo, en la Empresa de Perforación y Extracción de Petróleo (EPEP) Occidente o en la Central Termoeléctrica (CTE) Ernesto Che Guevara, entidades ubicadas en Santa Cruz del Norte, un municipio de la también joven provincia de Mayabeque.

Hay en estas entidades mucho sentido de pertenencia y responsabilidad, fidelidad y buena comunicación; hay aquí una alianza entre la administración y sus hijos más nuevos que confirma las ganas de hacer y contribuir en función de la obra común, como conoció recientemente Meyvis Estévez Echevarría, primera secretaria del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC).

Cuando llegamos a la CTE sus trabajadores, buena parte de ellos jóvenes, estaban en plena «disposición combativa» en una de sus unidades, y era admirable su alto nivel de profesionalidad y su compromiso con echar a andar la planta para generar y suministrar energía eléctrica y así minimizar, por ejemplo, las molestias de los apagones.

Aquí se aplica ciencia e innovación: se han puesto a funcionar equipos que con muchos años de explotación parecían inutilizables, como contó el ingeniero automático Yasnel Torres Asencio, su director. Pero, aquí hay una vocación social, como nos dijo Nayaren Sánchez Pérez, la secretaria general del Comité UJC, que bien conocen quienes conviven en el hogar de ancianos o van al policlínico del municipio para que estos sean espacios más acogedores.

Este sector puede palpar y sentir día a día cómo nos afecta el bloqueo, y ante ello es admirable cómo buscan alternativas. Lo que hacen son
heroicidades que logran hacernos sentir orgullosos de nuestra generación, en el país donde nos tocó el privilegio de nacer, crecer y desarrollarnos, les dijo la Primera Secretaria del Comité Nacional de la UJC.

Es ese también el sentimiento que habita en el corazón de la franja norte Habana-Mayabeque-Matanzas, hay aquí una fuerza joven que late al ritmo de este país. Ellos son parte de la EPEP, una entidad que crece, aprende y se desarrolla en busca de nuevos horizontes y que lo hace contando con su capital más joven, porque son tiempos de conectar talentos «superando el presente y creando el futuro».

La etapa que nos ha tocado es la más difícil, podemos decir, de los años de la Revolución, pero como siempre está nuestra energía y voluntad de apostar. Y por eso, hay que seguir apostando, como expresaron jóvenes de la empresa, por mejores salarios y condiciones de trabajo, propiciar mayor superación y fortalecer la recreación…

Por eso, como dijo Estévez Echevarría, «más allá de que sean militantes o no de nuestra UJC, les toca acompañar a todos los niños, adolescentes y jóvenes, atender sus preocupaciones e inquietudes, conocer sus aspiraciones y concretar sus proyectos de vida». Añadió que es un sector que hay que potenciar por ser de los ámbitos más importantes del país.

Fue intenso el intercambio con los jóvenes mayabequenses, esos que como los del resto del país, ni en verano descansan para garantizar importantes servicios y la producción que necesita nuestro pueblo. Como los que «sorprendimos» en la Ronera Santa Cruz del Norte, en la que aquel 27 de febrero de 1971 Fidel, al recorrerla, aseguró: «Levantemos aquí la fábrica de rones más grande de Cuba».

Más de medio siglo ha transcurrido de su visita y esa certeza sigue defendida por los trabajadores de la empresa y por quienes muy jóvenes se adentran en ella. Son muchos los retos que tienen y sobre ellos dialogó la Primera Secretaria de la UJC: la necesidad de fortalecer el comité de base, atender el universo juvenil, la superación y vinculación con proyectos, así como el aporte productivo.

Inspira la pasión con que hablan del proceso productivo del Ron Havana Club, el cual ha conquistado los más amplios sectores del mercado internacional y también del proceso de encadenamiento que vive la entidad. El colectivo de trabajadores de la ronera, entre ellos buen número de jóvenes, hace que esta sea un símbolo en Mayabeque, aseguró.

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.