Asamblea de la UJC. Autor: Osval Publicado: 13/11/2023 | 09:33 pm
SANCTI SPÍRITUS.— El título de este material pudiera entenderse como un juego de pronombres. Pudiera parecer una frase manida. Mas resultó el llamado por unanimidad de la delegación de la asamblea 12mo. Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) del municipio cabecera de esta provincia, como única vía para contrarrestar los problemas que obstaculizan el andar de la juventud en el actual contexto.
«Tenemos que unirnos como militantes en cada uno de nuestros más pequeños espacios: comité de base, centros de trabajo o estudio… Solo así nos haremos fuertes como organización impulsora de cuanto quehacer nos propongamos o nos convoquen. De esa forma, lograremos extendernos con efectividad a nuestras comunidades», expresó Yilianny Yera Marín, residente de la especialidad de Oftalmología.
Sabe bien de qué habla la joven galena, aún con olor a universidad, y cada día, gracias a la vocación y cooperación de su colectivo, atiende y sana pacientes en uno de los sectores más afectados por el bloqueo económico y financiero impuesto por Estados Unidos a nuestro país.
«Es un reto la atención a los enfermos por las limitaciones de recursos, pero no tiramos la toalla. Ponemos todas nuestras fuerzas, buscamos soluciones, innovamos y apostamos por la construcción colectiva. Y esa tiene que ser la estrategia de cada rinconcito para impactar al resto de la sociedad».
Con esa alerta oportuna, instó Yera Marín a visitar el programa Jóvenes de hoy, de Radio Sancti Spíritus, declarado voz del 12mo. Congreso de la UJC para no solo visibilizar resultados, sino también contagiar a las audiencias —de todos los grupos etarios— con el espíritu bisoño.
El tema de la comunicación, sus desafíos y trascendencia en la actualidad también movió el debate en la cita, que tuvo lugar en el teatro de la Universidad de Sancti Spíritus José Martí. En el escenario digital, la colaboración también es necesaria para que prevalezca la imagen de la Cuba del día a día, no la que intentan edificar de forma mal intencionada sus enemigos reales y virtuales.
«Nos corresponde desde el compromiso navegar en las redes sociales —reconoció Cristian Castellanos, quien egresará próximamente como médico de la Universidad de Ciencias Médicas de esta provincia—. Un ejemplo de lo que ahora mismo está sucediendo y nos demuestra la manipulación constante de la realidad es lo relacionado con mucho de lo que encontramos sobre Palestina e Israel. Si nos informamos, leemos, podemos de forma sistémica y sistemática contrarrestar esos discursos de odio con mensajes de paz por un mundo mejor, que sí es posible».
Amelia Quintero, alumna del Instituto Vocacional de Ciencias Exactas Eusebio Olivera, contó su experiencia al respecto con la membresía de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media (FEEM). Allí, con la guía constante del claustro de profesores se vuelcan en las redes sociales para, con sus códigos y tendencias digitales, visibilizar sus intereses, aspiraciones y múltiples realidades.
Un ejemplo reiterado en esta asamblea municipal y que inundó las redes sociales fue el protagonismo de la juventud en tiempos de COVID-19. «Nuestras universidades se convirtieron en hospitales. Acercamos los servicios a las poblaciones vulnerables. Volvimos a demostrar que la juventud es una generación activa, como lo ha sido siempre a lo largo de nuestra historia», recordó Laura Concepción, profesora de la Casa de Altos Estudios espirituana.
Muchas manos se alzaron para compartir criterios y opiniones sobre diversos temas: migración, producciones ineficientes, fisuras en el trabajo de una organización que sigue asumiéndose en algunos lugares solo para cobrar la cotización, poco impacto en las comunidades…
También se habló de dónde y cómo se ha logrado sumar a más jóvenes, gracias a que se han sentido protagonistas y necesarios en sus espacios, y de sus aportes en procesos legislativos únicos, porque la diferencia de criterios no atenta contra la Revolución, sino que la enriquece, y aporta a la defensa de la cultura e historia de la nación.
Sobre ese tópico, Roberto Bermúdez, integrante del Movimiento Juvenil Martiano instó a unir fuerzas para que finalmente se cumpla un deseo colectivo yayabero, que dignificará la memoria histórica de Cuba: «Desde hace años pedimos subir y colocar un busto de José Martí en la cima de Caballete de Casas, uno de los puntos más altos del histórico Escambray.
«Las respuestas han sido negativas porque alegan que se minimizaría la presencia ahí del Che, pero, ¿por qué conformarnos con esa explicación, si la obra del Che y de nuestra Revolución se sustentan en el pensamiento martiano?», cuestionó el joven, y su criterio encontró la aprobación unánime.
Ese mismo respaldo lo tuvo la afirmación de que la UJC no es una organización que escucha y se sostiene solo en el yo, tú, él… sino que necesita del ¡somos!