Las aulas anexas a los centros laborales irrumpen en la enseñanza técnica cubana. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 04:57 pm
La enseñanza media profesional cubana da hoy los pasos para formar la fuerza de trabajo en especialidades imprescindibles para el desarrollo del país, sin perder de vista el equilibrio entre universitarios, técnicos y obreros calificados, reportó PL.
Tenemos 47 especialidades de técnico medio y 20 de obrero calificado que se ofertan de acuerdo con las necesidades territoriales, expresó a Prensa Latina el director nacional de Educación Técnica y Profesional (ETP), Alexander Manso.
Al negar que exista la idea de reducir carreras en ese nivel del Ministerio de Educación, Manso expresó que podrían incluso aumentarse en sectores como el marítimo portuario, que demandará más fuerza cuando se amplíe el puerto de Mariel, en el occidente cubano.
Nuestra disposición es la de formar los graduados necesarios, aclaró Manso en una rueda de prensa tras delinear como prioritarias las carreras técnicas en las ramas agropecuaria, construcción, contabilidad y ferroviaria.
Necesitamos que el 60 por ciento de los graduados de la enseñanza básica acudan a la ETP y el resto al bachillerato, continuó el directivo al señalar como debilidad el mantenimiento del ideal familiar de contar con universitarios.
No es una camisa de fuerza, agregó Manso luego de expresar que los números dependerán de la demanda real de fuerza de trabajo.
Con los primeros pasos el curso pasado en la elevación de la calidad de los graduados, el subsistema educacional tiene una matrícula actual de 231 mil estudiantes, menos de la mitad de los que cursan la universidad.
Con el propósito de garantizar técnicos altamente calificados, como los requiere la producción, el director mencionó el rediseño de programas de estudio con la participación de especialistas de los organismos de la administración central del Estado.
También se decidió compartir la formación en aulas anexas a los centros de producción para suplir la ausencia de medios de enseñanza modernos en las escuelas politécnicas.
Los jóvenes además deberán elaborar tareas integradoras de conocimientos al final de cada año académico y enfrentarse a un ejercicio práctico estatal para graduarse.