La tecla del duende
SAN ERNESTO DE LA HIGUERA,/ Así en Bolivia te nombran/ porque aún tus restos alfombran/ la paz de la cordillera./ Con tu mirada certera/ el firmamento se aclara/ desde que flor en tu cara/ una estrella cervantina/ sabiéndote de Argentina/ te perpetuó en Santa Clara.// Los valientes como tú,/ 2- SAN ERNESTO DE LA HIGUERA,/ defienden la vida entera/ a la palma y al ombú./ No hay nada en Ñancahuazú/ que no recuerde tu hazaña/ ni en la Sierra una montaña/ que no sangre por tu herida/ ni en América una vida/ que no te lleve en la entraña.// Flores no vengo a ponerte/ ni a manchar la primavera,/ 3- SAN ERNESTO DE LA HIGUERA:/ Hoy vine a reconocerte…/ Recibe este abrazo fuerte/ que el mundo te quiere dar/ y empéñate en demostrar/ contra el crimen y el espanto/ porqué unos te nombran «santo»/ y otros «héroe popular».// Bien sabes que tu bandera/ no es en el viento una cruz/ sino un gran cóndor de luz,/ 4- SAN ERNESTO DE LA HIGUERA./ Llorando está la madera/ el llanto de la semilla;/ le duelen clavo y astilla/ y tanto dolor le duele/ que a cielo marchito huele/ cada hombre de la Guerrilla.// Son tuyos la voz pampera/ y el vuelo de la paloma;/ Camilo te hace una broma/ y Tania es más compañera/ 5- SAN ERNESTO DE LA HIGUERA,/ SAN de pólvora y de fango,/ tan de la luz es tu rango/ que el bandoneón de tu pecho/ pide en agitado lecho/ que Gardel reviva un tango.// Sé que tus manos están/ dolidas por tanto daño;/ que si el Plata te da un baño/ se funde con el Jordán./ Sé que es tan noble tu afán,/ 6- SAN ERNESTO DE LA HIGUERA,/ que tu boina guerrillera/ se convirtió en una tiara/ la noche que Víctor Jara/ gritó que tu hermano era.// Quién dijo que te amputaron,/ San Ernesto, la sonrisa;/ que tu mirar no suaviza/ las piedras que te tiraron./ No importa si te negaron/ el pan de alguna manera;/ 7- SAN ERNESTO DE LA HIGUERA:/ tú naciste para eterno,/ por sencillo, por fraterno,/ por no dejar tu trinchera.// De la libertad oriundo/ eres y Dios te perdona/ como cuando Maradona/ le dio una patada al mundo./ Tu corazón errabundo/ derrotó el asma y la tos/ cuando de la vida en pos,/ 8- SAN ERNESTO DE LA HIGUERA,/ burlando cauce y frontera/ te vieron partir veloz. // El Congo, Fidel, la bata/ de médico que luciste,/ Alberto Granados triste/ y Korda que te retrata./ El asesino que ata/ tu cuerpo con tanto miedo/ que va del temblor al pedo/ porque en su avidez de fiera,/ 9- SAN ERNESTO DE LA HIGUERA,/ la vida le importa un bledo. // Bolívar y San Martín,/ Martí también de tu lado/ (¡tanto sueño irrealizado!)/ y Marx, recio paladín./ La justicia es el botín/ que la humanidad espera;/ y mientras que Dios lo quiera/ y humedezca una vicaria/ se elevará esta plegaria,/ 10-¡SAN ERNESTO DE LA HIGUERA! (Cuba Ala Décima)