Acuse de recibo
Eudaldo Albertus Fernández (Calle 257, No. 11015, apto. 3, entre 2da. y 3ra., Tejas, San Miguel del Padrón, La Habana), relata los tropiezos e incertidumbres desde que, como trabajador por cuenta propia, el pasado 13 de enero pagó por transfermóvil los tributos a la ONAT que le correspondían.
Se percató de que en los dos últimos pagos no se le descontó la bonificación establecida por el uso del canal electrónico. Y envió al correo clientes@banmet.cu del Banco Metropolitano todas las evidencias de las capturas de pantalla, de las operaciones que sí descontaron y las que no.
«He recibido, manifiesta, las más absurdas respuestas, desde que ese día no estaba activa la promoción, cuando esta no tiene fecha ni hora, hasta que este hecho no era reversible.
«Después de tanta insistencia recibí la última respuesta el 23 de enero, y cito: “Su caso no ha sido olvidado, estamos en espera de respuesta por el
Departamento de Orientación Metodológica con este tema”».
Refiere el cliente que después les ha solicitado que le faciliten algún canal para reclamar algo tan elemental. Y no ha tenido respuesta. Paralelamente escribió al Banco Metropolitano por su canal en Telegram, explicando todo lo anterior. Y la respuesta fue que volviera a escribir al mismo correo, sin facilitarle otro canal superior.
«Ya se cumplió un mes, y no se ha resuelto algo tan elemental como enmendar un error —sea informático o humano— por algo que debió ocurrir, y que se ha promocionado permanentemente por nuestro Gobierno y por el Banco.
«Al parecer, se mantiene la burocracia, ahora digital, para asuntos tan sencillos como hacer cumplir una obligación bancaria prometida. Escribo a ustedes con la esperanza de que este asunto se solucione de una vez, pues me ha ocupado ya buen tiempo del mes transcurrido», concluye.
El Doctor Olimpio Rodríguez Santos, especialista de Segundo Grado en Alergia del policlínico Previsora, en la ciudad de Camagüey, cuenta que recibió en su consulta a un bebé de 17 meses derivado de la consulta del otorrinolaringólogo, a quien no puede aplicarle su proyecto de investigación y desarrollo consistente en torno a la apnea del sueño.
El facultativo, quien reside en Heredia, edificio D, apto. 2, entre Bembeta y Lugareño, en el reparto Boves de la capital agramontina, refiere que el impedimento está en la reticencia que ha tenido hacia ese proyecto la Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey (UCMC).
«Este niño que está comenzando a vivir, afirma Olimpio, es condenado a una pésima calidad de vida de no concretarse el diagnóstico definitivo y aplicarse el tratamiento de la causa que sospecha el otorrinolaringólogo y que confirmaremos en parte nosotros.
«Digo en parte porque, ¿qué faltaría para concretar un diagnóstico definitivo? Faltaría, además de las pruebas de punción cutánea indicadas ya, poder realizar el estudio de apnea del sueño o Policardiografía Respiratoria (PCR) para determinar si la obstrucción es la causa de la apnea del sueño que ya comienza a ver el otorrinolaringólogo y nosotros también.
«Las pausas respiratorias se perciben en un video que nos mostró la mamá. En una pausa puede perder la vida y se habla de muerte súbita. Esto lo podemos evitar con las vacunas de alergia sin llegar a la cirugía de adenoides, amígdalas y cualquier otro elemento que obstruya la respiración nasal.
«Para el estudio de la apnea del sueño, utilizando la técnica de PCR, contamos con todo lo necesario aportado desde Canadá. Sin embargo la UCMC no ha querido apoyarlo y esto crea dificultades por mucho esfuerzo que se haga», concluye el doctor.