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GUANTÁNAMO, mayo.— El mayor índice de conservación natural y biodiversidad del extremo oriental cubano se concentra en 29 zonas valoradas por la comunidad científica del territorio, dos de las cuales se ratifican dentro del Sistema Nacional de Áreas Protegidas, reportó la AIN.
Rolando Villaverde López, especialista de la Unidad Provincial de Servicios Ambientales, explicó a esa agencia de prensa que, en total, esas extensiones suman más de 366 mil hectáreas, en las que también se atesora el mayor grado de endemismo del Caribe Insular.
Destacó que, según sus características, dichos sitios están definidos en diferentes categorías de manejo: Parque Nacional, Reserva Ecológica, de Biosfera y Florística, Refugio de Fauna, Paisaje Protegido y Elemento Natural Destacado.
A las dos primeras pertenecen, respectivamente, el Parque Nacional Alejandro de Humboldt —el más extenso dentro del Sistema de Áreas Protegidas (SNAP), localizado en el Macizo Nipe-Sagua-Baracoa—, y la Reserva de Hatibonico, en el extremo oeste de la árida franja costera sur de Guantánamo.
Los valores de aquel primero son celebrados internacionalmente por el nivel de biodiversidad y endemismo de su flora y fauna.
Entre las propuestas aún por aprobar en el SNAP figuran el Yunque de Baracoa, el Cañón del Yumurí, el Paso de los Alemanes y Quibiján-Duaba, ubicados todos en la Primera Villa Cubana, privilegiada por su exuberante naturaleza.
Destacan además los parajes conocidos como Alto de las Canas, en el territorio de Imías, el Abra de Mariana y el Pan de Azúcar, en San Antonio del Sur, y Pinares de Montecristo, perteneciente al municipio de Guantánamo.
Estos sitios están sometidos a un régimen de monitoreo y conservación de sus valores para su próxima aprobación en el Sistema Nacional, encargado de conservar las riquezas naturales más representativas del país, garantizando la estabilidad ecológica y su uso sostenible.
