Lázaro Blanco (de frente) presenta muy buenos números en la Serie del Caribe. Autor: Roberto Morejón Rodríguez Publicado: 12/02/2019 | 08:40 pm
Con el premio al mejor derecho de la Serie del Caribe entre las manos y la afición panameña en un bolsillo, Lázaro Blanco mira a las gradas del Rod Carew diciéndole con los ojos: me voy, pero vuelvo pronto.
En 2017, en su debut en este tipo de justas, el espigado pitcher granmense, también había ganado semejante lauro y por sus números en tres ediciones seguidas (6 JL, 4G-1P, 1.22 de PCL, 1.16 de WHIP, 29K y 16BB) ha merecido abundantes elogios de expertos en béisbol del Caribe, algunos lo califican como el abridor más consistente en ese lapso.
«Me hubiera gustado lanzar el último partido, pero me tocó el que definía nuestro pase a la final, que era muy importante también, si no ganábamos aquel no hubiésemos jugado este domingo», confesó Blanco minutos después de que Toros de Herrera alzara un impensado título.
«Me voy triste porque no pudimos ganar, pero nos queda la satisfacción de que ambos equipos brindamos un gran espectáculo, ellos (Toros) fueron mejores y merecieron el campeonato».
Blanco ratificó que fichará por el club Chiriquí para la próxima temporada de la liga profesional de Panamá. «Los dirigentes de ese equipo van próximamente a La Habana para firmar el contrato y entre el 20 y 25 de este mes ya estaré aquí».
«Es un torneo de solo dos meses, después me incorporaré a la preparación para los Juegos Panamericanos de Lima y tengo pensado comenzar con los Alazanes de Granma la próxima Serie Nacional para ayudar a que clasifiquemos y podamos ser campeones por tercera vez», adelantó Blanco.
En las dos últimas campañas, el mejor pitcher contratado con la Federación Cubana de Béisbol jugó con los Capitales de Quebec en la Liga CAN-AM, por lo que no participó en el tramo inicial del campeonato nacional.
«Mis grandes metas deportivas son el tercer oro de los Alazanes e ir a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020», concluyó Blanco.