Acuse de recibo
Iset Maritza Velázquez Brizuela, vicepresidenta primera de Cimex, responde hoy a la inquietud del lector Jorge González Suárez, reseñada aquí el pasado 25 de noviembre, sobre el estado de abandono del famoso restaurante habanero El Pedregal —obra insigne de arquitectura—, que desde fines de 2015 está cerrado, y con un cartel de: Obra en preparación, Corporación Cimex.
Precisa la funcionaria que la instalación dejó de prestar servicios el 19 de enero de 2016 a partir del deterioro de sus sistemas constructivos fundamentales, y de la evaluación y aprobación de un proceso inversionista, para convertir esa unidad en un centro comercial que mantuviera la actividad gastronómica.
Por ello, precisa, se inició la preparación de la inversión el 20 de mayo, y se solicitó a Planificación Física los permisos correspondientes para el cambio de uso propuesto, así como la autorización para la reparación de los principales sistemas constructivos que están deficientes, fundamentalmente en cubiertas, carpinterías, pluviales, hidráulicos y sanitarios, entre otros.
El proyecto total de la obra en ejecución tiene prevista su conclusión en 2017. Y la primera etapa debe quedar concluida en febrero de ese año, e incluirá la recuperación de la originalidad de su expresión exterior inicial, así como la puesta en marcha del área de venta principal.
Y, de conjunto con la Empresa de Proyectos de Arquitectura e Ingeniería de La Habana, se está elaborando la segunda etapa, que incluye la organización de las diferentes áreas comerciales, su ambientación, sistemas contra incendio y vigilancia, climatización e iluminación.
Reconoce Iset Maritza que, mientras tanto, se ha descuidado la atención y saneamiento de las áreas exteriores, y se han adoptado medidas para su ordenamiento.
Al propio tiempo, informa del estado en que se halla la inversión que Cimex ejecuta en el mercado único Cuatro Caminos, futuro centro comercial que brindará múltiples servicios al cliente, y cuya inversión se ejecutará en tres años, de manera que se concluya para el 500 aniversario de La Habana.
Plantea que Cuatro Caminos, construido en 1920, fue deteriorándose estructuralmente. Dada la magnitud de la inversión para su recuperación, al ser una edificación patrimonial de grado 2, se ha desarrollado, desde 2014, un trabajo de preparación para la conformación de la documentación y elaboración de las ideas conceptuales. También fue estudiado el inmueble para la rehabilitación estructural y la concepción del proyecto. Este último se sometió a la revisión y aprobación por los organismos rectores, al efecto de la propuesta de inversión de Cimex.
En el segundo semestre de 2015, agrega, se inició la contratación para el aseguramiento de los suministros principales con vistas a la regeneración estructural, fachada y cubierta, además de trabajos vinculados a la seguridad de la edificación y facilidades temporales.
La obra, señala, está lista para iniciar los trabajos de regeneración estructural, y posteriormente las siguientes etapas previstas. Esta primera etapa se ejecutará con la cooperativa no agropecuaria Arqdecons, y se trabaja en la importación de los principales sistemas constructivos y tecnológicos para las fases posteriores.
Afirma que una vez concluida la inversión en el centro comercial Cuatro Caminos, además de los servicios previstos en la nueva concepción, se rescatará la actividad tradicional que dio origen a esa instalación en 1920.
Agradezco la respuesta de Cimex, que da elementos concretos sobre la inversión que diversificará la oferta de El Pedregal. Y con más razón celebro el hecho de que Iset Maritza haya aprovechado para dar una valiosa información sobre el proyecto que recuperará y modernizará un centro comercial tan importante de la capital, con múltiples funcionalidades y servicios.
Así como hizo Cimex, muchas entidades podrían, al responder aquí las quejas o inquietudes de los ciudadanos, aprovechar el espacio para brindar información de su interés. Esta columna es también de las instituciones, así como de los lectores.