El animal con los testículos más grandes en proporción al tamaño de su cuerpo no es un mamífero, sino un insecto: el saltamontes costero Platycleis affinis, cuyos «atributos» equivalen al 14 por ciento de su masa corporal, afirma el diario de la Royal Society, citado en Internet por el sitio extroversia.universia.net.co. Cada testículo de esta criatura pesa unos 70 miligramos. De aplicarse a un hombre tales proporciones este tendría que cargar en su escroto unos ¡10 kilogramos! aproximadamente.
Lo pasmoso para los investigadores es que esta gran capacidad testicular no le lleva a producir más esperma a la hora de fecundar a la hembra, como suele aceptarse en materia de evolución en el reino animal. Al parecer, los machos tienden a tener testículos más voluminosos, debido a que las hembras de su especie se aparean muchas veces en su vida adulta, como un mecanismo para garantizar ciertas ventajas a sus genes. Sin embargo, el saltamontes costero produce menos esperma en cada apareamiento, a pesar de que las hembras aceptan hasta 23 parejas en sus dos meses de existencia fecunda. El tamaño parece que es solo para «impresionar».