En este estado de sufrimiento se llega a considerar que no se podrá salir de esa crisis si la otra persona no actúa y siente como nosotros esperamos
Con los años se pierde el deseo sexual, pero es difícil para la otra pareja si esto constituye un problema en la relación
Es posible cambiar de posición ante estos impulsos que parecen incontrolables. Solo que es preciso comprender nuestra posición ante ellos, las razones por las cuales sucumbimos. Se requiere encontrar maneras nuevas de arreglarse con eso que nos llama al acto
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