Extinguir un incendio siempre es peligroso, pero en entornos cerrados, como un submarino o la cubierta inferior de un barco en alta mar, el fuego puede ser más complicado. Por eso científicos del laboratorio estadounidense de Investigación Naval (NRL) han formado un equipo interdisciplinario con el fin de desarrollar un robot humanoide para ayudar a extinguir incendios de esa clase, nombrado Zafiro. Este robot bombero con aspecto humano debe ser capaz de maniobrar bien en los pasillos estrechos y escalerillas que suelen ser típicos de submarinos y otras embarcaciones, en los que les resulta difícil a robots tradicionales o sencillos.
El nuevo androide debe mantener también el equilibrio en todas direcciones y superar todo tipo de obstáculos. Otro elemento clave del desarrollo es dotarle de la capacidad para trabajar en equipo con personal humano. Ya se adelanta en el desarrollo de los algoritmos necesarios para que el robot pueda tomar decisiones por su cuenta, y circular por la nave de manera autónoma.
Unas gafas que reúnen sofisticada tecnología de visión artificial y de recuperación de memoria han sido creadas por científicos europeos con la finalidad de ayudar a las personas que padecen de olvidos frecuentes. Los espejuelos registran todo lo que ven, y el usuario puede observar la película del día en todo momento, descubriendo así donde dejó olvidadas las llaves del coche o el teléfono móvil. Los creadores del artefacto pertenecen a la Universidad de Bielefeld, Alemania, y al Departamento de Ingeniería Eléctrica y Electrónica de la Universidad de Surrey, Gran Bretaña. Ellos trabajan en el Proyecto Vampire, centrado en la visión cognitiva computarizada, con financiación de la Unión Europea.
Un reloj cien veces más preciso que el actual distingue a la nueva técnica propuesta para medir el tiempo, la cual se vale de un neutrón en un núcleo atómico. Esta innovación podría tener una precisión tan grande que no llegaría a ganar o a perder más que la veinteava o la décima parte de un segundo durante 14 000 millones de años, un período de tiempo tan largo como el transcurrido desde la creación del universo hasta hoy.
Esa novedosa técnica permitiría, por tanto, contabilizar el tiempo con una exactitud hasta casi cien veces mayor que la de los mejores relojes atómicos actuales.
Los relojes atómicos usan, a modo de péndulo de reloj, electrones de átomos. Sin embargo, el equipo de investigadores ha mostrado que usando láseres para orientar los electrones de una manera específica, es factible usar un neutrón del núcleo atómico como péndulo, y esto permite obtener un cronómetro con precisión única.
Fuente: SINC, Noticiasdelaciencia.com y Amazings.com
Frase: El experimentador que no sabe lo que está buscando no comprenderá lo que encuentra.
Claude Bernard, fisiólogo francés.