En 1986 un grupo de arqueólogos descubrió una garra enorme de un moa: un ave gigante que medía hasta 12 pies de altura y pesaba unos 250 kilogramos
En 1986 un grupo de arqueólogos descubrió una garra enorme de un moa: un ave gigante que medía hasta 12 pies de altura y pesaba unos 250 kg, que, según los expertos, desapareció hace más de 2 000 años. La garra, aún intacta con músculos y piel escamosa, fue encontrada al cavar en un gran sistema de cuevas en el Monte Owen, en Nueva Zelanda.